El Xacobeo 2010 nos trajo anoche a Santiago a una leyenda viva del rock: Mark Knopfler, ex-líder de Dire Straits y uno de los guitarristas mejor considerados en la historia reciente de la música. Presentaba en directo su último disco, Get Lucky, que da también nombre la gira que ayer hacía parada por tierras gallegas, como os contamos hace meses. Una oportunidad de lujo para las casi nueve mil personas que se congregaron en el Multiusos Fontes do Sar de Santiago.
La carrera en solitario de Knopfler dista bastante de su etapa en Dire Straits: frente al sonido rock clásico de la mítica banda, el escocés muestra ahora claros tintes de blues y, sobre todo, del folk de raíz celta. Y así lo demostró en Santiago, abriendo su actuación con la flauta de Border Reiver, canción de su último LP que funcionó a la perfección como introducción para, a continuación, meterse en el bolsillo al público con la conocida What It Is. Aunque más que meterse al público en el bolsillo, Knopfler lo que tuvo que hacer fue quitárselo del mismo: por momentos las palmas de los espectadores silenciaban su voz, estaban plenamente entregados. Así, con el ligero toque country que siguió a Sailing to Philadelphia, Knopfler consiguió relajar un poco los ánimos del público.
Sólo le hacía falta levantarse para cambiar de guitarra, queridos frontmen amantes del postureo
Un público que era de lo más variopinto. Un amigo me dijo una vez que mi gusto musical era un poco de persona mayor (bueno, él dijo de “cuarentón”, pero no queremos herir sentimientos). De esos había unos cuantos, sí, pero también había mucha chavalada adolescente y veinteañero de espíritu musical cuarentón. Incluso se vieron familias, padres e hijos con la suerte de compartir el gusto por el gran músico escocés. Sin embargo, la edad no impidió que el contrabajo de Coyote animase al meneo de cabezas o al balanceo de hombros de Hill Farmer’s Blues.
Habían pasado casi cuarenta minutos de directo cuando llegó una de las canciones más esperadas: Romeo And Juliet. Coreada por el público, fue uno de los momentos más especiales del concierto para los fans de Mark que, junto con su banda (despojada esta vez de violines o flautas, sólo batería, guitarras y un bajo) interpretó el tema a la perfección. Cuando la canción terminó la emoción se mantenía en el público, que comenzó a entonar el ¡Oe oe oe! de los estadios de fútbol. Knopfler y la banda, lejos de esperar a que el público se calmase, acompañaron con sus instrumentos los cánticos. Una gran improvisación que sin duda hizo ganar enteros al directo que estábamos presenciando.
Supimos porque la Rolling incluye a Mark entre los 100 mejores guitarristas «de todos los tiempos»
Tocó entonces otro clásico: Sultans of Swing, con diferencia la mejor de todo el concierto, por la ejecución impecable de Mark, por trasladar al público a un concierto de los Dire Straits en sus mejores tiempos, por dejarnos con ganas de más sonido guitarrero y de ponernos una banda roja en la cabeza como hacía el escocés años atrás.
Estábamos por la mitad del concierto ya y era momento de presentaciones. Íbamos a ver a Mark Knopfler, sí, pero la banda que le acompañaba era, simplemente, un grupo de genios o, como el propio Mark dijo, “maestros”, que eran capaces de tocar diferentes instrumentos: guitarras, bajos, violines, contrabajos, banjos, teclados, flautas… Tras un tímido “it’s great to be here” sonó el acordeón de Done With Bonaparte y al rato estábamos en el oeste americano con Marbletown y Speedway at Nazareth. En todas ellas la banda arropaba a la perfección al escocés que, sentado en el centro del escenario parecía controlar el ritmo de todos sus músicos.
Increíble la banda que le acompañaba
La genial pero pausada Telegraph Road pondría el cierre oficioso al concierto, dando paso al primero de los dos bises. Sonó entonces de manera triste la archiconocida Brothers in Arms: faltaron los mecheros, pero los brazos en alto afectaron a casi todo el público. La cosa se animó con la siguiente: So Far Away encendió de nuevo las palmas, que al final de la canción se convertirían en ovación.
Una cañita y a por los bises
El broche final vendría de un tema que en directo se hizo casi totalmente instrumental y perteneciente a su último LP: Piper To The End. Se ponía fin así a dos horas exactas de concierto que a muchos del público le supieron a poco, pues la petición de bises se oyó un buen rato… hasta que las luces se encendieron. Estaremos allí la próxima vez que se apaguen.
Setlist:
1. Border Reiver
2. What It Is
3. Sailing to Philadelphia
4. Coyote
5. Hill Farmer’s Blues
6. Romeo And Juliet
7. ¡Oe oe oe! jam
8. Sultans of Swing
9. Done With Bonaparte
10. Marbletown
11. Speedway at Nazareth
12. Telegraph RoadBis 1:
13. Brothers in Arms
14. So Far AwayBis 2:
15. Piper to the End
Si os interesa escuchar el setlist del concierto podéis hacerlo en este enlace a una lista de Spotify.
Mark Knopfler: Página oficial | MySpace | Last.fm | Twitter | Facebook
¿15 temas solamente y la entrada costaba 50 euros? Me parece abusivo…
Dicen que el sonido no fue muy bueno en algunos lados…
http://www.lavozdegalicia.es/ocioycultura/2010/07/29/00031280397862342879374.htm
Yo estuve el día 25 viéndolo en Córdoba. Fue un setlist similar, aunque me parece que varió en una o dos canciones si la memoria no me falla. Estuvo genial.
Por cierto, lo de estar sentado es algo que viene haciendo en sus últimos conciertos por una lesión de espalda.
@skuark No tenía ni idea de su lesión… así que por eso era que tocaba sentado! Igualmente, este hombre se basta con sus manos, los solos fueron una pasada.
Genial, Kid A! Me alegro de que lo pasaras bien.