Seguramente ya hayáis leído alguna de las crónicas publicadas anteriormente acerca de los directos de Havalina o puede hayáis leído también la entrevista que en su día le hizo uno de nuestros antiguos compañeros al cantante Manuel Cabezalí. Si no es así, quizá os interese saber que el trío madrileño empezó el año dando conciertos en Galicia: el viernes pasado estuvieron en La Iguana Club de Vigo y el sábado en la sala LeClub de A Coruña, donde además de interpretar temas de sus tres trabajos, nos deleitaron también con alguna que otra canción nueva. Y como cantaban aquellos de Mecano: «allí me colé y en el concierto me planté, una Estrella Galicia para todos y algo de comer…» ¿o no era así?

Eran ya cerca de las once de la noche cuando el sonido de una de las cinco guitarras que Cabezalí traía consigo, acompañada en todo momento por un bajo y unos ritmos claros y precisos del batería, comenzaba a envolver a una sala tímida, sin esperarse nada de lo que allí iba a pasar. De manera casi inevitable, la gente empezaba a acercarse cada vez más al escenario y a mover la cabeza a merced del ritmo marcado por los densos acordes del primer tema, Desierto, canción que abre también su último trabajo Las hojas secas, el cual tuvo especial presencia a lo largo de la noche. Tras presentarse y contarnos lo mucho que les gustaba volver (si mi memoria no me falla, era la tercera vez que visitaban la ciudad herculina) empezaron Tu ciudad, otra de las más rockeras y pegadizas del último álbum.

Sueños de esquimal, de su disco Imperfección, sonó algo más relajada que sus predecesoras pero nerviosa al mismo tiempo ya que auguraba la vuelta a las guitarras afiladas que tanto caracteriza a Havalina. Así que, con un público más entregado, sumergido en la Imperfección tan perfecta del rock de los madrileños, y después de gozar con una de las canciones más duras, Síndrome de culto, de la que voy a destacar el épico final, nos hicieron partícipes de una de las canciones nuevas que pretenden presentar este año (junto a un nuevo disco): Viaje al sol.

Tras tocar algunos de sus mejores temas, era el turno de otra de las más calmadas, Punto de reconciliación que daría paso a una dura ruptura emocional en Objetos personales. Estas dos canciones tan bien cogidas de la mano empezaron suaves, seduciéndonos para ir cogiendo fuerza y desembocar en la pegadiza A golpe de bisturí, incluida en su primer trabajo, Junio. Mientras terminaban ésta pude ver a la mayoría de los asistentes moviéndose de alguna manera para seguir el ritmo de la música de los madrileños, aunque predominaban los movimientos de cabeza.

Y por fin llegaba el potente tridente de la noche: Mordiente, Mamut y Por la noche. La voz de Manuel era inundada por su guitarra y un bajo cruel, acompañados de Javi a la batería. Las dos primeras canciones, sin olvidar ese punto tan lascivo y carnal que tienen, golpearon las paredes de la sala demostrando una vez más esa percusión stoner que pocos grupos poseen. Acto seguido y después de unos merecidísimos aplausos, nos sorprendieron con la lenta y preciosa Por la noche, cerrando así la primera tanda de canciones.

La parte de los bises vendría sobre todo de la mano de otra de las canciones nuevas, El estruendo. Os puedo asegurar que si el nuevo disco sigue en la línea de las melodías rockeras de los temas que presentaron la pasada noche, puede que la carrera de los madrileños se consolide más aún si cabe. Y como el público nunca se conforma, siempre pide más, empezaron con el ya conocido tema Incursiones, que muchos coreamos a pulmón guiados por la fantástica y a la vez erótica voz de Manuel y de sus dos compañeros. Tras ésta, el propio cantante, todavía entre aplausos, soltó un: «venir a Galicia es muy guay, cada vez mola más» que daría paso a los agradecimientos por parte del trío madrileño a toda la gente de la sala LeClub y al proyecto Girando por Salas.

Se marcaron un último tema para llegar al éxtasis de la noche, Desinspiración. Sin duda, una de las mejores canciones que intentaron alargar hasta el infinito y más allá y que muchos no queríamos que terminara nunca. Tras casi quince minutos, se despidieron sonriéndole a un público contento y satisfecho.

Setlist:

1. Desierto
2. Tu ciudad
3. Sueños de esquimal
4. Imperfección
5. Síndrome de culto
6. Viaje al sol
7. Punto de reconciliación
8. Objetos personales
9. A golpe de bisturí
10. Mordiente
11. Mamut
12. Por la noche

BIS:
1. El estruendo
2. Incursiones
3. Desinspiración

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