Iggy Pop fue uno de los artistas invitados al Tibet House Benefit Concert, un evento anual que tiene como objetivo recaudar fondos para preservar la cultura tibetana.

El músico estadounidense solo interpretó tres canciones, pero compensó dejando material de sobra para su presumiblemente futura biografía. Comenzó arrancándose la camiseta al poco de empezar para lanzársela a Patti Smith, dejándonos ver todo su torso de 62 años… y un trozo de la raja del culo cuando se daba la vuelta. Lo siento, pero no había manera elegante de contar ese pequeño pero importante detalle.

La nota culminante la puso durante su interpretación de «I Wanna Be Your Dog», cuando saltó del escenario al público sin que nadie lo recogiese, pegándose un sonoro castañazo contra el suelo. Aquí sus sabias declaraciones tras el incidente:

Cuando aterricé me dolió e hice una nota mental pensando que Carnegie Hall (NdT: el lugar del evento) sería un buen lugar para mi último salto del escenario. Todo el público tenía una cara de «¿qué estás haciendo?»

Si es que, amigo Iggy, hay que echarle un ojo al público antes de hacer según que cosas: no es lo mismo un grupo de millonarios acudiendo a una causa benéfica hoy en día que una loca multitud seguidora de The Stooges hace 30 años.

Para culminar, se fue por bulerías.

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Vía: Matador Nights.