Volvemos a las noches de conciertos Mr. Mandarina y yo. ¿La excusa? El concierto a medias que darían en la sala Garufa los barceloneses The Destroyed Room junto con Back to 1984, otro de esos grupos resultantes de mezclas y combinaciones de la nutrida escena viveirense y coruñesa. Aún con propuestas diferentes, ambos grupos confluían en el mismo tipo de vehículo para su música, punk-folk acústico de peso en las guitarras y voces melódicas. A ver que se traían entre manos.
A las 23.36 salían los Back to 1984 con caras más que conocidas de la escena galaica del hardcore y con el buen detalle de ofrecer un flyer a la entrada con el que poder descargar el primer disco de este grupo que se espera no tarde mucho en salir. Primer punto a su favor. Aunque en un principio los Back to 1984 saldrían solo con su primer frente de guitarras, finalmente para el concierto contaron con batería y bajo, si no me equivoco, de igual forma que aparecerán en el disco del grupo (que por cierto llevará por nombre Punk Rock Shelter).
No nos decidimos a quién nos recordaba Back to 1984, al arrancar pensamos que quizás podía recordarnos a alguna línea vocal de NOFX, algún toque macarra a lo Rancid y finalmente coincidimos en acordarnos de los menos conocidos Avail, eso sí, de forma acústica combinando dos voces distintas de peso bastante repartido que hacía que funcionase la maquinaria a la perfección. Las letras del grupo cubren todo el espectro de las temáticas sociales: desde la lucha por los derechos de los animales hasta la defensa de un estilo de vida apartado de las convenciones sociales y una vuelta a recordar las cosas verdaderamente importantes.
Imbuido de este espíritu sale también el nombre del grupo, pequeño tributo a un año clave para la escena hardcore en el que las cosas aún (recalco el aún) se hacían por la ilusión de tocar sin verse sometido a yugos mercantilísticos. A pesar de que la sala registró una afluencia media, Back to 1984 consiguió motivar al público lo suficiente para meterlos dentro del concierto. Buen sabor de boca deja este grupo que esperamos volver a ver muy pronto (y os animamos a vosotros a hacerlo) se nota cuando un grupo controla lo que está haciendo desde hace tiempo y simplemente presenta una nueva propuesta dentro de su ya dilatada experiencia en el hardcore o punk. Para no deshacernos tantos en halagos, lamentamos que una de las guitarras y voz se oyera menos y como capricho hubiese apetecido alguna versión de un clásico del punk noventero en acústico, precisamente este grupo nos recordaba a cuando teníamos 16 años y eso, es un puntazo.
Tras ellos vinieron The Destroyed Room, grupo con más amplia trayectoria gracias a seis discos en el mercado y un modus operandi completamente DIY que hace que se ganen el cariño y el respeto de muchos seguidores, Tanaka Music incluidos. ¿A qué suenan los The Destroyed Room? Podéis coger a Dashboard Confessional y echarle una pizca de folk. Otra. Otra. Cuando le echéis la cuarta puede que ya empecéis a entenderlo. The Destroyed Room no engañan a nadie, se sabe bien cuales son sus influencias (camisetas de Hüsker Dü y Bad Brains incluidas) y su propuesta suena bien o mejor, muy bien. La combinación de la voz principal y los coros (ambas buenas voces) funciona a la perfección, no sé si por talento o por mucho trabajo detrás de bambalinas.
Nos dio pena que en ocasiones los micrófonos no les hicieran justicia y tuvieran que pelear contra indeseados acoples. También batallaron con la ausencia del batería (que se quedó lesionado en la ciudad condal) o la del banjo, presente en sus grabaciones consiguiendo que a pesar de habernos gustado tenerla allí, no fuera un problema para disfrutar del conciertazo que dieron. La actitud en el escenario presentando las canciones, algunas de amor, otras de desamor y otras cercanas a himnos de bar que cantar noche sí, noche también (si tuvieramos la voz suficiente) convencieron también al respetable que quiso entregarse para hacerles sentir como en casa.
Fruto de esta unión entre público y grupo quiso que para el bis decidieran desenchufarse y tocar su Circle Of Friends precisamente de esa forma, en un círculo con sus «amigos» (al menos nuevos amigos) que sonó increible e hizo que nos preguntásemos si no deberían tocar siempre entre el público. Otro de esos momentos que dotan de calidad y magia a un concierto. Para redondear la faena podemos contar que además son personas encantadoras y su merchandising y discos están disponibles a precios muy asumibles. Y aún no nos han pagado para todos estos halagos. Solo esperamos que se vuelvan a pasar por aquí pronto, sea en concierto o a tomar algo para ver si los convencemos para que nos canten algo.
Setlist:
1. The Beers And The ‘Mats
2. Another Catcher In The Rye
3. All The Wrong Reasons
4. In My Wildest Dreams
5. Teaser
6. Trucks And Cars
7. 1989
8. Disasters & Miracles
9. The Cheater
10. Memories Bite Like Rats
11. Drinkin’ Like Fuck
12. It’s All HappeningEncore
13. Circle Of Friends
Back to 1984: MySpace
The Destroyed Room: MySpace | Facebook | Bandcamp | Twitter | Last.fm
Que buen show! A ver cuando se repite!
Aún no hemos puesto las fotos, pero las subiremos :)
Que excesivo jajajajajajaja
No viene a nada que salgamos Oski y yo xD
Sois los resus. Sois importantes. Pero si quieres las quito, no hay problema.
ey chicxs gracias x las palabras amables hacia nosotros hehehe… podria pediros un favor?? me ayudariais a promocionar la gira de Tim vantol y Matt Tansey por españa, en nuestro blog y facebook tenemos el cartel subido, aqui tocaremos con ellos en el bar tio ovidio a mediados de noviembre…..
graciñasss y animo
M.