La verdad es que ha sido un poco complicado para mí hacer esta reseña, pero estaba bastante expectante por lo que podría dar de sí Yann Tiersen, una vez liberado de las ataduras de la vertiente clásica de su arte instrumentístico, y con el camino que había tomado con su anterior trabajo, la cosa prometía, y mucho. De ahí que tuviera tanto interés en ocuparme yo mismo de ésto. Y creedme, ha merecido la pena, porque después de compartir estas palabras con vosotros, me siento más aliviado, más… vivo que nunca. Pero dejémonos de zarandajas y vayamos al turrón.
Los detalles técnicos ya los comenté en el otro post, donde anuncié la salida del disco, pero debo añadir también que este álbum, Skyline, fue grabado en tres estudios diferentes, situados en París, San Francisco y Ouessant (una islita de la Bretaña francesa). Así que una vez todo dicho, y sin más dilación… ¡ésto es lo que pienso del disco tema por tema!
«¡La madre que la parió! ¡La cucaracha sigue ahí!»
Another Shore: Con un sonido cada vez más alejado de sus orígenes, y una atmósfera cercana al post-rock, este tema nos presenta una confluencia de sonidos crudos y livianos, representados respectivamente por la guitarra eléctrica y el glockenspiel. Cuando todo está creciendo y pensamos que va a llegar el clímax, la canción frena de golpe y se abre una sección ambiental dominada por sintetizadores y una guitarra con e-bow maravillosa… ¡y vuelve de nuevo el maravilloso estruendo! En algunos momentos, este interesante tema parece sacado de un extraña y bizarra película de los 70 de alienígenas que vienen a la tierra, pero esa extraña mezcolanza resulta cautivadora y sirve perfectamente como inicio de lo que presagiamos, un trabajo discográfico con letras mayúsculas.
I’m Gonna Live Anyhow: Con un comienzo bastante caótico de guitarras, samples vocales y circuitos girando como locos, la línea desemboca en una combinación bastante curiosa de coros que usan perfectamente el espectro sonoro, jugando con las direcciones y con la intensidad de las mismas. Destaca un pequeño crescendo que lleva el tema hasta un pequeño parón dominado por los instrumentos acústicos, que devuelven la presencia a los coros en una pequeña instancia. Luego, los sintetizadores comienzan a fluir descontrolados y a generar un ambiente lleno de arpegios, barridos de ruido, percusiones livianas pero efectivas, más y más coros hasta desembocar de nuevo en la tranquila parte acústica, con la que termina el tema.
Monuments: El primer single del álbum (excepcionalmente elegido, por otra parte) es un tema más llevadero y homogéneo que los anteriores, en el que las percusiones dominan la presencia instrumental, junto con las campanas, el acordeón y la línea vocal multiplicada por varias pistas. Bastante al uso de lo que Tiersen estaba haciendo ultimamente, y en mi opinión, un tema bastante interesante que combina lo mejor de las dos facetas del francés, mezclando momentos eclécticos con arreglos más clásicos. Un gran producto para los oídos y para las listas de ventas, sin duda alguna. Me gusta el pequeño puente central, en el que parece que todo va a terminar y los filtrados y procesos se erigen en protagonistas de esa sección y del resto del tema, dejando un resultado maravilloso.
The Gutter: ¿Es un discurso de Hugo Chavez? ¿De Fidel Castro? No importa de quién sea, el caso es que el comienzo es más que perfecto, con el ambiente noise y los coros, acertadamente introducidos cuando el discurso comienza a amainar el volumen. Una batería de lo más post-rock cobra protagonismo enseguida y el tema gana en cuerpo, presencia y carisma, mientras que el acordeón y los teclados hacen que todo camine en el sendero correcto, presentando a la guitarra eléctrica como piedra de toque y aumento de crudeza en el tema, con un resultado realmente agradable. Una pequeña caída de todos los instrumentos presagia el final de la pista, pero el piano del comienzo vuelve a sonar junto a una calmada guitarra y es ahí cuando realmente la canción finaliza.
Exit 25 Block 20: Este tema lleva el ritmo metido dentro del cuerpo. Muy oscuro, con gritos, un glockenspiel que más que entrañar ternura, con esas circunstancias da pavor. Recuerda a un circo de deformidades o a Halloween… ¡y me encanta! La verdad es que la combinación de todos esos instrumentos y la adición de las guitarras poco después resulta en una mezcla desconcertante, atronadora por momentos y deliciosa en todos los segundos que dura. Una pena que el crescendo central (con más ambiente circense que nunca) no durase un poquito más. De todas formas, es el tema en el que mejor uso veo de la síntesis.
Igualito de expresivo que Keanu Reeves.
Hesitation Wound: Se trata de un tema eminentemente ambiental, con dominio exclusivo de lo que se asemeja a una mandolina mezclada con sintetizadores, un piano desafinado electrónicamente y más capas de sintetizadores. Todo varía cuando se introducen las voces filtradas y cobran algo de presencia más instrumentos igual de ambientales y coros recitados y cantados en armonías dispares y ciertamente extrañas. A la mitad del tema se incorporan un oscilador con arpegios de todo tipo y unas notas sueltas de piano que amplian la presencia espectral del tema, con un resultado magnífico. ¡Y por fin escuchamos un violín en el disco, que ya iba siendo hora! El violín lleva una melodía triste que muere demasiado pronto y el tema sigue fluyendo para desembocar en la siguiente canción.
Forgive Me: En este corte, que ostenta ciertos detalles de country, como los cencerros y las guitarras típicas con rasgueos y melodías simples de pocas notas, la cosa cambia pronto a un ritmo más animado con la entrada de la batería y los demás instrumentos; aunque sigue presentando ese toque, incluso con reminiscencias a Knights Of Cydonia de los británicos Muse. Sorprende también la inclusión de sonidos de ordenador y unos coros tremendamente fantasmales, a la par que un final deponente de lo más hipnótico. En definitiva, creo que este tema sería representativo de un hipotético caso en el que el country hubiera nacido en Francia. Curioso, cuanto menos, y bastante destacable.
The Trial: Esta pista comienza donde lo dejó la anterior, con una secuencia muy calmada de piano de juguete y glockenspiel que va creciendo en melodía y armonía para acabar convirtiéndose en un tranquilo tema ambient con más sintetizadores y coros junto a los instrumentos anteriormente nombrados y una tranquila cadencia flautosa. Sin embargo, hacia la mitad del tema, las guitarras cogen el testigo y animan el cotarro considerablemente, hasta el punto de llegar las voces en múltiples registros y la batería, que cambia la dirección del tema convirtiéndolo en el santo y seña del álbum, desde mi punto de vista. El tema más completo.
Vanishing point: Nos encontramos ante el cierre del álbum, que presenta un comienzo muy calmado (ambient, cómo no), hasta que entran las voces y los coros más etéreos del disco, un esbozo de guitarra y un patrón rítmico con batería y barridos de ruido bastante logrados. Los sintetizadores recogen el testigo a la mitad del tema y parece que Jónsi se hubiera animado a colaborar con Yann en este tema, porque el ambiente final es muy similar al estilo del islandés en Grow Till Tall, salvando los coros femeninos y el final ralentizado, que nos deja con un buen sabor de boca, ¡pero también con mucha hambre!
Podríamos decir que Yann Tiersen aprueba con nota este segundo paso de su evolución a lo experimental. Es posible que a muchos no les guste este cambio tan drástico y prefieran sus primeras obras, pero la verdad es que a mí me encanta esta nueva experimentación sonora que el Francés está llevando a cabo.
Nota: 7’5/10
Y como de costumbre, aquí os dejo la portada y el tracklist del disco (en negrita los que considero mejores temas), para que tengáis todo bien juntito y luego no os quejéis, ¡que os conozco!
Tracklist:
1 – Another Shore
2 – I’m Gonna Live Anyhow
3 – Monuments
4 – The Gutter
5 – Exit 25 Block 20
6 – Hesitation Wound
7 – Forgive Me
8 – The Trial
9 – Vanishing point
Escucha el álbum: Spotify
Yann Tiersen: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm
«una vez liberado de las ataduras de la vertiente clásica de su arte instrumentístico,»
¿Ein? ¿Qué significa esto? ¿Es una frase pseudometafíscia de relleno cultureta o va en serio? Porque es una cagada monumental:
a) Pareces decir que hay género mejores que otros…
c) y que la expresión sinfónica es limitada comparada con otras…
b) y que el pop barato es mejor que esas líneas sinfónicas.
Pues oiga, es evidentemente al revés. El pop es por definición la simplifación más comercial posible, una basura comparado con el sinfín de posibilidades que ofrece tener buenos conocimientos de la orquesta (donde Tiersen, con pocos intrumentos y mezclando otros géneros, ha hecho maravillas).
Por desgracia lo que ha hecho Tiersen en este disco, que en una primera escucha me parece de lejos lo más flojo que ha escrito, es pop (dream pop o lo que sea) bastante estándar: limitadísimo en forma, estilo, letra y resultados.
Así que, de nuevo, ni entiendo la frase ni en el entusiasmo que suscita alejarse de lo bueno para ir a lo malo.
«y con el camino que había tomado con su anterior trabajo, la cosa prometía, y mucho. »
Lo mismo. ¿Apartarse de una línea riquísima en sonoridades, original e inspirada como no se ha visto en años, y decantarse por el pop comercial es bueno?
Es evidente que no os gusta la buena música, o que no la sabéis entender.
Es la primera y última vez que visito este blog.
No tomes la opinión de un solo redactor como toda la del blog.
Antes de nada, remarcar las palabras de Mr. Mandarina, en las que señala que es MI opinión del disco, no la de todo el blog.
Y ya metidos en harina, lo que significa esa frase de las ataduras bajo mi punto de vista se llama «evolución y exprimentación». En ningún momento digo que haya géneros mejores que otros, sino que simplemente a mí me gusta más ésta vertiente de Tiersen que la otra. Así de sencillo. Lo que usted llama «pop barato» no es mejor ni peor que las líneas sinfónicas (o viceversa), simplemente son diferentes, y lo mismo diría de las expresiones sinfónicas.
Creo que ya lo he dicho miles de veces, pero lo comercial no tiene por qué ser malo. Que a usted no le guste, no quiere decir que a otros no pueda gustarle (como es este caso). Me parece que aquí la «culturetada» se la está largando usted, sr. Keffer, ya que no soy yo el que presupone que algo es mejor que otra cosa alegando estereotipos y prejuzgando «a primera escucha». A ver si ahora por el mero hecho de ser sinfónica, cualquier cosa va a ser mejor que las que no lo sean (tomemos como buen ejemplo Music Of The Spheres, de Mike Oldfield, obra orquestal; y comparémosla con Amarok o Tubular Bells, obras no orquestales).
Y remarco, «apartarse de una línea riquísima en sonoridades, original e inspirada como no se ha visto en años y decantarse por el pop comercial» (aunque a mí el álbum me puede parecer algo comercial, pero desde luego no pop, pero eso ya es cuestión de cada uno) se llama evolución, se llama explorar otras facetas de la creatividad.
En cuanto a nuestro gusto por la música (o más bien el mío, en este caso, por lo que veo), ya se sabe cómo son los gustos… como los culos, porque cada uno tiene el suyo propio. Y criticones salimos todos por naturaleza, caballero, así que intente entender que hay gustos diferentes al suyo, aunque no los comparta.
Hola,
siendo previsor, y para que no saltes con lo de «cómo son los gustos… como los culos, porque cada uno tiene el suyo propio», te digo desde ya que lo que expreso aquí es mi opinión sin querer menospreciar, en ningún momento, la tuya.
1) Creo que es conveniente que examines la forma de escribir tus reseñas ya que, termino sabiendo los 200 instrumentos que salen en el disco, pero echo en falta (después de leer decenas de párrafos) un examen artístico de forma global del disco (léete lo que has escrito para I’m Gonna Live Anyhow, ¿que quieres decir con todo eso!? nada). Te recomiendo que compres cualquier revistilla de música. La rockdelux, que tiene reseñas en 70 palabras dice más que esta.
2) Exceso de adjetivos y de los que no saco nada en conclusión: «confluencia de sonidos crudos y livianos», o «En definitiva, creo que este tema sería representativo de un hipotético caso en el que el country hubiera nacido en Francia.» muy ‘En definitiva’ sí señor. O comparar un tema con «una extraña y bizarra película de los 70 de alienígenas que vienen a la tierra» me dice mucho también
3) Copio: «The Gutter: ¿Es un discurso de Hugo Chavez? ¿De Fidel Castro? No importa de quién sea» Pues no, para que, ni el contexto histórico, ni lo que dice, ni nada. Está añadido como quien añade la sintonía de Los Serrano.
Así que vayamos al caso. Voy a hablar sobre tu último párrafo, que considero que después de todo, es la crítica: «Podríamos decir que Yann Tiersen» y tal y tal.
Si te gusta esta experimentación sonora, créeme que hay millones de grupos de postrock, noise, art pop, dream pop, o como quieras llamarlo que superan con creces la calidad de este disco. Justamente, elogias aquellos temas que yo considero peores (Exit Block…etc) por falta de personalidad, por ser una fácil conjunción de instrumentos sin ningún tipo de desarrollo (importantisimo en el postrock)… y bueno, cada uno tiene du opinión, pero Dust Lane era mejor, y esto en tal caso, es una involución, (experimental?? esto es experimental?? Un grupo AA si hace música experimental) con misma filosofía y con al única diferencia de hacer más uso de la electrónica sin cambios en la construcción.
Saludos.
Bueno sí, tienes algunas diferencias en la construcción. Yann en Dust Lane no hizo canciones tan POP, (en el mal sentido de la palabra) como en este disco. Facilón.
Saludos.
Saludos, y agradezco la crítica a mi reseña. Siempre es bueno saber dónde uno falla para poder mejorar. Si todas las opiniones fueran iguales, qué aburrido sería el mundo en general.
Sé que tengo una forma muy peculiar de escribir las reseñas, y que con dicha forma enfoco las cosas de una manera muy personal, que no cuadra con la visión (o expectación) del resto, con lo cual no puede quedar perfecta para todo el mundo. No soy profesional ni pretendo serlo, y solamente hago esto para divertirme y dejar entrever lo que pienso sobre cada disco que reseño, no para ser el reviewer supremo ni ganarme la vida con reseñas (sé que no podría hacerlo). Veo que tú concibes esto de una forma muy distinta a la mía, y creo que la entiendo, pero en este caso no la comparto.
Sé de sobra que hay millones de bandas que tienen álbumes mucho mejores que éste en todos esos géneros que comentas. La elección de temas va más en un modo personal y a tenor de lo que me transmiten, no de la calidad instrumental o compositiva. Concuerdo contigo en que Dust Lane es un trabajo mejor a todos los niveles que éste, no obstante.
Y con respecto al tema de «experimental», es la etiqueta más sencilla para que el grueso de la gente que pueda leer esta reseña lo identifique con un género, aunque sé de sobra que no es la más adecuada.
Aún así, un placer leer comentarios críticos y a la par respetuosos y educados como el tuyo.
Por cierto, siempre si te apetece y estas dispuesto, ya que nombras a Jónsi aquí, en este post, hazte una reseña de «Go». Veo que sacáis muchas noticias y no decís nada, enfocado como esta crítica de Skyline, sobre el disco en sí (o no lo he encontrado en búsqueda). Sobre todo por curiosidad, ya que a mi me transmite un sinfín de sensaciones, muy gratas todas.
saludos.
Lo haría encantado, créeme. Pero la publicación de una reseña de un disco que salió en 2010 (creo recordar) a estas alturas de 2011, sería un tanto resesa, más que reseña, con perdón del chiste malo. No obstante, siempre podemos dialogar por mail (en la columna derecha, About, y buscando mi nick) sobre ese disco, que a mí me gusta bastante, he de decir.
Un saludo. ;)
Hola, me alegro de encontrar la reseña. A mi también me gustó el disco, tiene mucha conexión con Dust Lane. Es cierto que muchos prefieren sus labores anteriores, pero creo q el giro está bueno y sigue demostrando su gran capacidad de composición y ejecución. Con respecto al discurso de The Gutter, lo dio el Che Guevara ante la ONU, en 1964.
Saludos,
T