Al igual que ocurre en el mundo de la música, en el del cine las listas son omnipresentes: día tras día, a alguien se le ocurre que estamos muy interesados en saber quiénes son los mejores no sé qué durante el período no sé cuántos, y se empeña en plasmarlo en papel. Una de las pocas compilaciones que no ha pasado sin pena ni glora es la organizada por la Cinemateca de Toronto al comienzo de la pasada década, donde se elegían con los votos de las principales filmotecas del globo los mejores trabajos realizados hace dos. Y si ha permanecido en el recuerdo, al menos en el mío, es, sobre todo, merced a dos causas: la primera, obviamente, la posición cabecera ocupada por la nunca suficientemente ponderada El sol del membrillo, de Víctor Erice; la segunda, por lo que la inclusión de Pulp Fiction supuso de consagración para el cine de Quentin Tarantino, motivo de disputa cinematográfica durante todos los noventa, dada su controvertida labor consistente en cortar y pegar de aquí y de allá, sin importarle lo más mínimo que entre las materias primas del collage se diesen la mano John Ford y figuras de las artes marciales o el blaxploitation.
Este reconocimiento crítico definitivo del posmodernismo en el arte me impide, por desgracia, despachar estas líneas explicando que Is Tropical, cuya jeta debería aparecer ilustrando la entrada de diccionario de tan inextricable concepto, suenan a mil cosas ya escuchadas en otros tantos grupos modernuquis, muchos de ellos ni siquiera especialmente reseñables, de entre los que el primero que se viene a los labios de cualquiera será, sin duda, MGMT. Pues, efectivamente, no son en absoluto originales, pero lo que cabe preguntarse es si lo pretenden en algún momento o, yendo más allá, qué importancia tiene.
Un baile nuevo.
Si corregimos el examen, que lleva por nombre uno tan rocambolesco como el de sus autores, Native to, haciendo la vista gorda al hecho de que se lo pasasen entero copiándole a los compañeros, incluso los de las filas más alejadas; si le pegamos un buen mordisco a esta grasienta hamburguesa cuya carne sabemos de rata, no nos queda otro remedio más que aprobarlos, que mirar de reojo para que nadie nos vea chuparnos los dedos por culpa de esta afición inconfesable.
Uno tras otro, y sin ningún discurso, hilo argumental ni nada que se le parezca, dotados de sentido completo, se suceden los temas con vocación de destrozar las pistas de baile, si bien es cierto que no todos lo logran con el mismo éxito: entre los más certeros se encuentra The Greeks, el tema que los dio a conocer entre la mayoría, gracias no solo a lo musical, sino también a su llamativo vídeo, que sirvió de reclamo para ser enlazado en cientos de foros, muchos de ellos lejos del target de una música killer (killer de Brandon) que peca a la vez con los vicios del indie y del mainstream. Para explicar en unos pocos sonidos qué son Is Tropical basta con describir brevemente The Greeks: el sintetizador que imita a un sirtaki y reproduce algo similar al tema de Bonanza para introducir un mantra machacón (recibes lo que das, pero solo si lo das) presentado entre unas guitarras y una percusión que compiten por ser las más estridentes. Para este viaje no hacían falta tantas alforjas (no tengo muy claro lo que significa esta frase hecha, pero queda siempre fenomenal).
Imagen real y dibujitos, como la película aquella de Kim Basinger.
En la misma liga BBVA juegan Land of the Nod, que remite (si bien es cierto que tampoco excesivamente más que el resto del disco) a MGMT; la también juguetona, rescatada de una barraca de feria, con sus sintetizadores extraídos de la banda sonora de los coches de choque y la caseta de tiro, Clouds, o los ecos de LCD Soundystem (salvando las, de por sí insalvables, distancias entre James Dios Murphy y estos pelagatos londinenses) en Think we’re Alone. O los guturales gruñidos de Zombie: por charlotadas no será, que hay para elegir.
Es posible que lo olvidemos mañana; es probable que no lo recordemos dentro de un mes; es seguro que lo habremos borrado de nuestra memoria el año que viene, pero no pasa nada por echarnos unas risas y unos bailoteos a su costa. Comida rápida, música rápida. You only get what you give away; you’ll only get it if you give it away.
Tracklist:
01 – South Pacific
02 – Land of the Nod
03 – Lies
04 – The Greeks
05 – What???
06 – Clouds
07 – Take my Chances
08 – Oranges
09 – Berlin
10 – Think we’re Alone
11 – Zombie
12 – Seasick Mutiny
Nota: 6/10
Nota de los usuarios:
[ratings]