Allá por el año 2009 la expectación era enorme cuando un grupo llamado Chickenfoot («patapollo») anunciaban que sacarían un disco y algunos no sabían si se trataba de una simple broma o iba en serio. Pronto se descrubrió que era real, y Sammy Hagar (ex-Montrose, ex-Van Halen, ex-HSAS, ex-Los Tres Gusanos), Chad Smith (Red Hot Chili Peppers), Michael Anthony (ex-Van Halen) y Joy Satriani dieron el campanazo. Y no es porque yo lo diga, no hay más que fijarse en todas las alabanzas que recibieron y los puestos que llegaban a alcanzar en todas las listas habidas y por haber. Ahora, con Chickenfoot III, su segundo trabajo recién salido del horno, el supergrupo alcanza otro nivel. Superior, por supuesto.
Satriani pasó a todos su estilo de vida: ‘Gafas de sol 4ever’
Y el disco empieza bien fuerte, con uno de los mejores temas. Last Temptation lo tiene todo para representar de forma brillante lo que significa Chickenfoot: una guitarra impecable, la voz imponente de Hagar (que recuerda a sus mejores años en Van Halen) y un ritmo que engancha desde la primera escucha. A esta le siguen dos canciones de también un muy alto nivel, como son Alright Alright y Different Devil. Diferentes entre sí pero con un denominador común: la calidad. El frontman saca lo mejor de sí en la segunda de ellas, muy recomendable.