La espalda duele un poco después de comerte casi 500 kilómetros de autopista portuguesa (sí, con esos fantásticos conductores pasando a 170 como si nada). No hacía falta madrugar, pero viendo el cansancio con el que llegas, casi hubiera valido la pena hacerlo. Pero sabes cual es la recompensa, y todos los males desaparecen según se acerca la hora esperada y recuerdas, casi como si fueran de la familia, lo nombres que englosan el pedazo de cartel del Optimus Alive. Cierto es que se llega un poco empapado. No por el sudor, porque a pesar de que hacía sol, el calor se soportaba bastante bien. No. Es por la noticia de que Florence + The Machine se caía del cartel, que sentó como un verdadero jarro de agua fría a todos los asistentes. Pero lo importante era llegar y poder disfrutar de nombres tan grandes como Radiohead, The Cure, Mumford & Sons, Justice o The Stone Roses.
Todavía salía Florence + The Machine…
Los días previos, desde la promotora del evento, Everything Is New, se encargaron de hacernos la boca agua paulatinamente. Sobre todo a través de su página en Youtube, en la que colgaron varios vídeos como el montaje del enorme Palco Heineken (con esta conocida marca de cerveza como nuevo patrocinador, sustituyendo a la Super Bock), el spot pata televisión o el momento en el que probaban la instalación de las luces en el Palco Optimus.
Así que, todavía encajando la noticia de que cambiaban a la Florence por Morcheeba, había que ir por la estación de Cais do Sodré para coger un billete a Cascais, para bajarse antes en la parada de Algés. Habían ampliado las horas de regreso a partir de medianoche, con lo que era el sistema ideal para ir y volver al recinto. Eso sí, deberían haber puesto alguna que otra taquilla más y también dos o tres máquinas expendedoras de billetes, porque había al menos una de las seis que no funcionaba y las colas llegaban hasta fuera, con lo que corrías el riesgo de tener que esperar media hora hasta el próximo tren si perdías el que querías mientras esperabas. El viaje en tren fue la antesala del primero de los tres días de conciertos que esperaban.
NOTA: No he pisado en ningún momento el Palco Optimus Clubbing (el chunda-chunda, vamos). Simplemente, creo que había cosas más interesantes que ver.
Viernes, 13 de julio:
Palco Optimus
Justice
The Stone Roses
Snow Patrol
Refused
Danko JonesPalco Heineken
Death In Vegas
Zola Jesus
Buraka Som Sistema
Santigold
LMFAO
Miuda
Dum Dum Girls
The Parkinsons
La verdad es que no me extrañó en absoluto cuando The Times lo situó como uno de los 10 festivales de referencia en Europa este año. El cartel era de impresión, y ninguna de las jornadas desmerecía la atención de cualquiera de las otras dos. Con este panorama, el precio de la entrada (105 euros para los tres días) se paga de buena gana. Y más cuando ya a las 19.00 horas, tras un breve recorrido de reconocimiento, te encuentras con las Dum Dum Girls en el escenario «pequeño». No se dejaron (casi) nada en el tintero y ofrecieron un buen setlist, en el que destacaron canciones como Bedroom Eyes, Always Looking o Jail La La.
Casi sin tiempo había que desplazarse a la otra punta del recinto para ver como acababa el show de Refused. Con la fuerza que los caracteriza, y aunque por falta de tiempo no se pudo escuchar el concierto entero, se notaba por la afluencia de gente que dieron un buen espectáculo, y eso que no era uno de los nombres que más me llamase la atención. Así, por ejemplo, no faltó la mítica New Noise. Desde luego, junto con Awolnation (que actuaban al siguiente día) era este uno de los grupos diferentes que hace falta en este tipo de eventos.
Lo dicho, pura energía
Por pura curiosidad (y no por otra cosa) había que realizar dos sesiones de conciertos para la próximas tres horas de ese soleado viernes. Por un lado, tocaba ver a Snow Patrol y a LMFAO. De los escoceses tampoco es que sea un gran fan, pero hay que reconocer la buena labor que desenvolvieron en el Palco Optimus. Se despacharon a gusto con 15 temas, entre los que destacaron las conocidas Open Your Eyes y Just Say Yes. En la mitad de su actuación tocaba ver que era eso de LMFAO. Evidentemente, sabía a lo que me enfrentaba. Pero al ver la gran cantidad de gente que había en el lugar, al menos, esperaba espectáculo. Pero simplemente fue lo mismo que en los vídeos. Dos tíos con pelo raro que si, interactuan mucho con el público, pero cuyas canciones, al menos a mí dejan mucho que desear.
Después de haber escuchado su segundo disco de estudio (Master of My Make-Believe), Santigold me llamaba mucho la atención. Por otro lado, y casi a la misma hora (lo que considero un fallo de la organización), actuaban The Stone Roses. La buena de Santi no se dejó atrás la genial y nueva Disparate Youth, ni tampoco otras de su primer trabajo como Creator o Say Aha. Costaba querer despegar los pies de ese pedazo de concierto que ofreció la americana, pero como se trataban casi de la bomba del festival (junto a Radiohead), había que ir a ver que hacían los británicos.
Santi y su show
The Stone Roses ya llevaban alguna canción, pero todavía quedaban un par de temas antes de que Justice invadiese el escenario. Abieron el espectáculo con I Wanna Be Adored, y como se puede apreciar en este vídeo que circula por la red, no están en su mejor momento. Esos gallos no son normales para un cabeza de cartel y decepcionaron en gran medida. Cierto que es que en los conciertos en el gran palco del festival el sonido a veces jugaba malas pasadas. Pero bueno, leyendo otras crónicas de conciertos anteriores del grupo ya ibas un poco sobre aviso, y la larga Fools Good estuvo genial. Pero una canción no salva un concierto. No es como en fútbol, que en una jugada puedes cambiar un partido. No. The Stone Roses no convencieron más allá de sus fans incondicionales que los esperaban con los brazos arriba desde las seis de la tarde.
Y con estas llegamos al que creo que era, sin duda, el concierto grande del día. Me decía mi compañero James Ulrich meses atrás que Justice en un espacio abierto no es lo mismo que en una sala. Pero lo cierto es que se salieron como esperaba. La acústica será mejor en un lugar cerrado para lo que hacen los franceses, pero canciones como D.A.N.C.E. o Civilization pusieron patas arriba el paseo marítimo de Algés. Allí se reunió mucha gente y todos muy contentos, porque no era para menos. No faltaron canciones de Audio, Video, Disco ni tampoco de su primer trabajo y dejaron muy buen sabor de boca a los presentes.
Os dejamos ahora con un vídeo resumen que colgó la empresa organizadora del festival y, como no soy mucho de hacer fotos en los conciertos, os dejamos con la galería de imágenes subidas al Facebook oficial de la marca Optimus. Espero que os haya gustado y en nada tendréis la crónica del segundo y tercer día de este pedazo de evento.
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