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Muchas veces se nos da por secuestrar a un grupo y le hacemos pasar por un interrogatorio policial. Lo hacemos llamar «entrevista» y luego lo ponemos aquí.

«El factor clave creo que es esa mezcla entre la música americana y la obra de ciertos grupos ingleses como los Beatles»: entrevista a WolRus

A pocos días de su directo en la sala Mardi Gras de A Coruña, hemos tenido la oportunidad de hablar con Miguel, uno de los componentes del grupo local WolRus. Entre pregunta y pregunta nos ha dado detalles sobre cómo sonará el que será el tercer álbum del grupo, la manera de componer… Pero también nos ha adelantado que el concierto de este viernes junto a su amigo Pardo, será único. ¿Queréis saber por qué?

WolRuS by Nestor R.Pardo 1

Bea: Sabemos de buena mano que este año volveréis a los estudios para grabar un tercer álbum, el sucesor de ‘Chasin’ the light’ y que el viernes 28 será la última fecha antes de entrar en el estudio. Y qué mejor forma que hacerlo que dentro de un ciclo de conciertos como son Los Conciertos de Retroalimentación. Así que, continuando un poco por ahí, ¿tenéis alguna sorpresa confesable preparada? ¿Algún invitado especial?

WolRus: Para nosotros será un show especial, hace más de un año que no tocamos en Coruña y seguramente pase otro largo tiempo hasta que lo volvamos a hacer. En el concierto del viernes 28 estrenaremos algunos temas nuevos que nunca han sido oídos fuera del local, intentaremos también intercalar nuestro set eléctrico y acústico y bueno, va a haber alguna colaboración, puede que lleguemos a ser nueve en algún momento del show en el escenario…

B: Pude veros en directo a finales de 2012 en la sala LeCub presentando ese epé y fue una puesta en escena extraordinaria con una interpretación tan sutil y delicada como caótica y explosiva a la vez, como si los seis estuvierais sacando fuera toda vuestra energía sobre el escenario. ¿Pretendéis seguir ese patrón en el nuevo álbum?

W: Creo que saldrá un álbum muy ecléctico, hay canciones muy diferentes en las que estamos trabajando… Las intensidades a las que te refieres creo serán un factor clave, sí.

B: Llama la atención vuestro sonido, esa mezcla de rock intimista, con el folk más melódico y psicodélico, que recuerda un poco a todo lo que cada uno de vosotros hacéis por vuestro lado, pero sin remarcar demasiado esos aspectos en WolRuS. En cualquier caso, la pregunta es: ¿qué ha motivado este sonido tan exquisito? ¿Cuáles son o han sido vuestras influencias más directas a la hora de hacer música?

W: Nos une nuestra pasión por la música, nuestras influencias son muchas, el factor clave en WolRuS creo que es esa mezcla entre la música americana y la obra de ciertos grupos ingleses como los Beatles.

B: ¿Qué proceso creativo marcáis como pauta de trabajo para conseguir esa instrumentalización tan cuidada?

W: Escuchar primero una canción desnuda y luego imaginarte cómo vestirla. Ves si la canción brillaría más siendo acústica o eléctrica, si vendría mejor un Hammond o una harmónica, un banjo o una mandolina, un fuzz o un delay… Al ser seis siempre hay muchas opciones.

B: ¿Qué escuchabais en el momento de componer ‘Chasin’ the light’?

W: No se me ocurre ningún disco en especial que nos influyera a la hora de componer o grabar ese disco, los cuatro temas originales más la versión de Gene Clark que lo componen son bastante diferentes entre sí, aunque siempre hay referencias a algo en cada una de las canciones, eso es inevitable, toda esa música que has escuchado está ahí dentro en el subconsciente y sale por algún lado… En el Chasin’ the Light quizás intentamos sonar menos retro.

B: Este epé apareció un año después del primer elepé «Wooden Tapes». ¿Cómo veis vuestro primer debut desde el punto en el que os encontráis ahora mismo, a puntito de grabar un tercer álbum?

W: El Wooden Tapes es un disco familiar, grabado por nosotros en casa con mucho amor y paciencia, con sus pros y contras. La formación era distinta, estaba Saleta en lugar de Dris y no estaba Diego. Hay gente que prefiere el Wooden al Chasin’, otros al revés. A mi me gustan los dos, pero el Wooden siempre será especial.

B: ¿Creéis que escucharíais en casa estos discos si no estuvierais vosotros mismos involucrados?

W: Buena pregunta. Siempre me habría gustado poder escucharnos desde fuera, verlo con la objetividad del oyente que no tiene nada que ver con la obra. Quizás sería menos crítico… O al revés… Afortunadamente nunca lo sabré.

B: Además de la inminente entrada en el estudio, ¿cuáles son los planes de WolRuS para este año? ¿Podríais adelantarnos algo?

W: Plantearse grabar un LP es un gran plan que conlleva mucho esfuerzo y paciencia, llevarlo a cabo una aventura en estos tiempos. Aún no hablamos del cómo ni dónde, así que sólo podemos adelantaros que hay canciones, que vamos a intentar grabar un LP este año y dejar los directos a no ser que salgan cosas puntuales interesantes que nos apetezcan hacer, como este concierto en los ciclos de Retroalimentación.

B: Y para terminar, sabiendo que os movéis por la ciudad herculina y viendo el panorama del fin de semana, con una grandísima oferta de conciertos, ¿es cierto que parece que hay una nueva época dorada de los directos? ¿Qué opináis del público en general?

W: Debería haber conciertos todos los días, en las calles, en los centros comerciales, en los Zaras. ¡Fuera el hilo musical! Realmente ser músico hoy en día no es una opción para vivir dignamente, el dinero se lo reparten los de siempre y es casi imposible vivir de tocar, así que los directos se convierten en el único momento que el músico quizás no pierda dinero y pueda pagar el local. Se convierte en algo por amor al arte y una fuente de gastos importante, mantenimiento de equipo, local, grabaciones… Todo cuesta. Quizás lo que más jode es pensar que sin invertir dinero no se genera dinero, sin pagar campañas de promo no vas a estar donde tienes que estar para tener al menos la opción de competir en la liga de los festivales. Pero es como el fútbol o cualquier otro negocio de masas. Esto no va a cambiar hasta que cambie todo lo demás…

Y bueno, sobre lo que preguntas del público en general, opino que sin público no hay música en directo, sin el feedback de una audiencia no tiene sentido todo esto. Sólo espero que no hablen muy alto el viernes por lo menos cuando esté mi querido amigo Pardo en el escenario!

B: Muchas gracias y nos vemos el viernes.

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«A medida que avanzamos notamos cómo las canciones van cambiando lo suficiente como para tener ese punto de mejora necesario a la hora de llevarlas al directo»: entrevista a Autumn Comets

En su tercer y último trabajo Moriréis en Camboya, Autumn Comets han sabido volatilizar su sonido complejo de una forma absolutamente personal. Tras un debut autoeditado y un segundo disco que les dio a conocer en la escena independiente, se han convertido en una de las bandas que más ha sorprendido durante 2013, y con motivo de su actuación el próximo mes de enero por tierras gallegas (el 24 estarán en el Liceo Mutante, en Pontevedra; y el 25 en A Casa Tomada, en A Coruña), hemos tenido la posibilidad de charlar con Pablo P. Campesino, batería del grupo y esto es lo que nos ha contado.

Autumn Comets

Bea: Ahora que ya tenéis vuestro tercer disco, se suele decir que es ahí cuando se sienta la cabeza y se afianza el estilo del grupo. ¿Estáis de acuerdo?

Autumn Comets: En nuestro caso ha sido así, aunque es cierto que los hechos han influido bastante. Es el primer disco con el nuevo bajista, Mario, y tras su entrada se dio un repaso a toda la base rítmica, lo que nos llevó, casi sin querer, a concebir las canciones de otra manera, una manera más directa y sin «perdernos» tanto en cambios constantes. Es un disco más contundente, por así decirlo, más compacto. Y eso normalmente suele llevar a pensar que se ha sentado la cabeza. Veremos qué pasa con el cuarto.

B: ¿Qué historia hay detrás del título de vuestro último trabajo «Moriréis en Camboya» y tras todo el disco en general?

AC: La historia es muy sencilla, nos lo gritó una mujer borracha en Zaragoza en mitad de un concierto. Justo después de gritarnos «¡Más rock, maricones!» y «¡Esos punteos, Robert Palmer!». Hemos vuelto un par de veces a Zaragoza y no hemos vuelto a verla. Una pena. Las letras del disco sí tienen más miga, sólo que no cuentan historias con principio y final. Se parte de una idea real y a partir de ahí hasta donde la mano mande. Santa Teresa, tal vez, sea en realidad la más real. La más cruda.

B: La crítica os elogia bastante definiendo que sonáis como una mezcla de diversas bandas como Wilco, Death Cab for Cutie y Fuck Buttons, por citar unos pocos. ¿Qué opináis de todo esto?

AC: Nos gusta y nos hace gracia, porque a veces nos comparan con grupos tan diferentes entre sí que hay que pararse a pensar. El último que nos dijeron fue, tras un semi-acústico, The XX. Bastante improbable. Es cierto que se nos enciende una luz cuando nombran a ciertos grupos. Low, por ejemplo. Palabras mayores.

B: Habéis hecho una extensa gira este año y por lo que sabemos, continuaréis en 2014. ¿Qué acogida está teniendo vuestro directo tanto entre fans como en gente que os esta descubriendo aún ahora? Ya que por decirlo de alguna manera, sois un grupo que gana en él.

AC: Sin duda somos un grupo de directo. La clave es que disfrutamos mucho y no concebimos sacar discos para dar diez o quince conciertos. Cuantos más, mejor. Con esta gira habremos dado cerca de cuarenta, y a medida que avanzamos notamos cómo las canciones van cambiando lo suficiente como para tener ese punto de mejora necesario a la hora de llevarlas al directo. Respecto a la acogida habría que hablar del Sonorama. Estar en un festival así, llenar la carpa y notar que hay gente que se ha parado a escuchar un disco que tal vez sea «complejo» y haya escogido vernos por encima de otras opciones… Uf. Pelos de punta al recordarlo.

B: Siguiendo con el directo, ¿creéis que la interpretación debe ser una representación perfecta del sonido del disco u os permitís el experimentar con sonidos y cambios que sólo la inmediatez de estar sobre el escenario os permite hacer?

AC: Sonar como el disco tiene mucho mérito. Muchísimo. Pero nos parece algo aburrido. En directo somos, en el buen sentido de la palabra (esperamos) mucho más imperfectos. Hay ciertas canciones que acaban de una manera u otra, depende del desarrollo del concierto. Nos permitimos ciertas licencias y creemos que eso la gente lo nota. Nos han dicho alguna vez algo que nos encanta, que es que cuando nos ven, en algún momento, notan cierta tensión al no saber qué va a pasar. Igual también influye que solemos acabar un poco desmadrados…

B: De entre todas vuestras canciones hasta ahora, ¿tenéis alguna favorita? ¿Por qué? Tirando un poco por las anécdotas, me gustaría dejaros espacio para que contéis lo que queráis sobre el proceso que habéis seguido para dar a la luz este disco.

AC: Creo que en directo Plans es la que nos toca la fibra sensible a todos. Es con la que solemos acabar y descargas la tensión de los 50 minutos de concierto en ella. Santa Teresa suele servir para «medir» cómo ha ido hasta ese momento. Tiene un principio lento, que va subiendo, y cuando explota solemos notar si el público explota con nosotros o está algo más frio. Por suerte lo hemos estado consiguiendo. Más que anécdotas habría que hablar de la semana que pasamos en los estudios de Raúl Pérez, La Mina, en Sevilla. Es como estar una semana en una cápsula del tiempo. Lo de fuera no vale, te aíslas y los días pasan de manera extraña. Un lujo.

B: Y ya que hablamos tanto de influencias musicales también quiero preguntaros por vuestras otras influencias, esas películas, libros o series, o demás que habéis querido plasmar en forma de canción en el disco.

AC: Siendo seis esto daría para horas! Pero estamos de acuerdo en muchas cosas, fundamentalmente en series. The Wire, Los Soprano y A Dos Metros Bajo Tierra han pasado por las manos de varios de nosotros. También Breaking Bad. Respecto a películas, reconocemos que hay un sector con cierta tendencia a ir al cine a ver pelis de robots gigantes que pelean contra mutantes gigantes, o «pelis de espadas» como dicen ellos. Cine intelectual.

B: ¡Muchas gracias!

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“Cuando escribes una canción no estás pensando en lanzar mensajes, sino en hacer algo honesto y con lo que te sientas identificado”: entrevista a León Benavente

Han firmado uno de los mejores discos nacionales de este casi extinto dos mil trece. Un debut de canciones atrevidas y acertadas en las que albergan la realidad de un presente cada vez más oscuro bajo el nombre homónimo al del grupo, León Benavente. Emocionados con su propuesta desde el mismo instante en que tuvimos constancia de ella hasta ahora (así lo reflejan a continuación), hemos tenido la oportunidad de entrevistarles para saber qué se esconde detrás del proyecto de estos cuatros amigos y para saber también cómo les ha ido este año. Así que sin más dilación, os dejo en su compañía.

Leon Benavente

Bea: León Benavente. Abraham Boba, Eduardo Baos, Luis Rodríguez y César Verdú. Pero antes de empezar con este pequeño cuestionario para conoceros un poco mejor, enhorabuena por la inminente publicación de un nuevo epé, «Todos contra todos», el pasado día 10. ¿Cómo ha sido ese frenesí creativo y el arriesgarse a incluir una versión?

León Benavente: En realidad todas las canciones del EP, excepto Avanzan las negociaciones, que es la más nueva de las cuatro, son canciones que incluimos en el repertorio desde el primer concierto. Por eso para nosotros este EP funciona a modo de complemento del disco. Decidimos grabarlas para que la gente que va a nuestros conciertos las conozca y además nos hacía mucha ilusión editar un 10”. En cuanto a la versión es una canción de Ilegales de hace treinta años, pero que sigue totalmente vigente. Nos parecía que encajaba perfectamente con el discurso del grupo.

B: Os habéis convertido en poco más de medio año en una novedad más que interesante en el panorama musical nacional con la publicación de un brillante primer disco homónimo y sin buscarlo se os ha etiquetado bajo el nombre de ‘supergrupo indie’. ¿Os sentís identificados de esa forma?

LB: No, no somos super nada. Somos cuatro buenos amigos a los que nos gusta juntarnos para hacer música. Lo de supergrupo no deja de ser una etiqueta más para orientar al oyente, algo que se viene utilizando desde hace años para designar un grupo en el que sus componentes vienen de otras formaciones. En cuanto a lo de indie, es una etiqueta que ha perdido tanto su significado que utilizarla hoy en día no tiene sentido.

B: ¿Qué es lo que buscáis en este proyecto que no hayáis hecho antes? ¿Diríais que habéis madurado y evolucionado aún más gracias a esta propuesta musical?

LB: Por supuesto. Con cada nuevo proyecto aprendes algo, por eso es necesario no estancarse en una sola manera de hacer música y aprovechar las oportunidades para juntarse con otros músicos para crear algo nuevo, como en este caso. Con este nuevo proyecto buscábamos hacer un disco de canciones directas, sin florituras, y que pudiesen crecer cuando las tocásemos en los conciertos.

B: Suponemos que lo más complicado habrá sido llegar a un punto en común a la hora de llevar las canciones en una misma dirección, ¿no?

LB: La verdad es que no demasiado. Suena a tópico, pero todo se ha desarrollado muy rápido y de forma natural. Cada uno tiene claro lo que mejor sabe hacer y qué puede aportar al conjunto y desde el principio los cuatro hemos trabajado en la misma dirección.

B: «Ánimo, Valiente» fue el primer tema que nos dejasteis escuchar de León Benavente. ¿Creéis que parte de la sociedad actual necesita escuchar a diario esas dos palabras?

LB: Desde luego es una expresión que a día de hoy se hace necesaria, en el entorno en el que vivimos. Cuando escribes una canción no estás pensando en lanzar mensajes, si no en hacer algo honesto y con lo que te sientas identificado. Y en el momento de escribir esta canción a los cuatro nos parecía un buen grito de guerra.

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B: Tal y como reflejáis en las letras de vuestro primer trabajo, ¿es más fácil hoy en día hablar, no sólo en la música, sobre problemas, desamor, la crisis, política… que al contrario?

LB: No creo que sea ni más fácil ni más difícil. Los temas que tratar están ahí, tan solo tienes que llegar a ellos y escoger las palabras adecuadas. La música popular ha tratado ya todos los temas posibles. Por eso, desde mi punto de vista, no es tan importante el tema que trates, si no la forma de acercarte a él.

B: Podemos afirmar que este año ha sido un buen año. Habéis sido uno de los ganadores de esta edición del Girando por Salas, habéis participado también en todos los festivales que habéis podido, y habéis tenido muchísimo éxito por toda la geografía española. ¿Alguna anécdota confesable?

LB: Nos han pasado muchas cosas buenas. En este momento recuerdo un concierto en Badajoz en el que teníamos en primera fila a un padre y a su hijo de 16 años coreando las canciones como si fuesen amigos de la misma generación.

B: ¿Aún afloran los nervios a la hora de salir al escenario o es algo que se aprende a controlar con el tiempo? ¿Cuál es el primer recuerdo que tenéis cada uno sobre un escenario?

LB: Sí. En el momento en el que dejas de estar nervioso antes de subir al escenario es que algo falla. Por supuesto en algunos conciertos está más relajado que en otros, en los que hay más presión. En cuanto al primer recuerdo, como grupo, creo que será siempre nuestro primer concierto como León Benavente en el 12 y medio de Murcia.

B: Para ir terminando, una pregunta obligatoria: ¿Cómo veis la escena independiente española en este momento?

LB: Desde hace unos años la industria musical se encuentra en un proceso de cambio constante. A los grupos les sigue costando mucho sacar adelante sus proyectos, en parte por exceso de información y en parte por falta de ayudas.

B: Completad la frase: León Benavente hacen música al estilo…

LB: León Benavente

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«Es lo más complejo y elaborado que he hecho hasta el momento»: entrevista a Presumido, el nuevo proyecto de Tarci Ávila

Aunque el nombre de Presumido os pueda sonar a nuevo en la escena, el artista que se esconde detrás de este seudónimo es Tarci Avila, guitarrista que ha trabajado con buena parte de las bandas del panorama musical gallego. Ahora despega en solitario con este proyecto nacido de la necesidad de hacer algo nuevo como un reto personal. Pero veamos qué nos ha contado él sobre este primer epé, Ahora Mejor.

Bea: Tarci Ávila. Guitarra. Guitarrista de grupos como Igloo, Blows, Eladio y los seres queridos y muchos otros. Pero cuéntanos, ¿cuál es el primer recuerdo que tienes con ese instrumento bajo el brazo?

Tarci: Pues la verdad es que el tema de la guitarra fue algo bastante tardío (creo que 16 o 17 años). Antes tocaba el piano. Si bien, el «descubrimiento» del instrumento de 6 cuerdas (o 7, en mis inicios… jajaja) estuvo directamente ligado a mis comienzos en bandas. Por otro lado, el primer recuerdo que tengo con un instrumento es un teclado de juguete Yamaha, estilo Casio Tone, que me regalaron cuando tenía 4 años, al que le faltan dos teclas y que he recuperado después de tantos años para Presumido. Es precisamente el culpable de casi todos los sintetizadores marcianos» que escucharás tanto en la grabación como en directo.

B: ¿Qué escuchabas cuando eras más joven? ¿Alguna cosa inconfesable?

T: Está de moda tener un lado musical oscuro e inconfesable en el pasado… Yo creo que todo me ha empapado de una forma u otra. De pequeño escuchaba mucho a Mike Oldfield porque le encantaba a mi padre. Y me pasé al lado más macarra muchos años más tarde con Nine Inch Nails. Pues mira, al final aunque musicalmente no se parezca, he acabado montando un proyecto multiinstrumentista. como ellos.

B: Desde que pusiste en marcha tu carrera en solitario has ido mostrándote cada vez más como un hombre-orquesta. ¿De dónde viene esto? ¿Ha sido una evolución nacida de trabajar como solista o ya jugabas con varios instrumentos a la vez antes?

T: Han sido varios los factores que me han motivado para llegar a este concepto artístico. El primero es que llevaba mucha música dentro e iba a explotar si no la sacaba de una vez. El segundo, es un formato adaptado a estos tiempos en los que correr con los gastos de una banda de 4 o 5 personas se hace casi imposible. El tercero es querer hacer algo original (no creo que haya inventado la penicilina de la música, pero desde luego a la gente le está sorprendiendo mucho mi planteamiento). Y el cuarto es por un puro reto personal. Es lo más complejo y elaborado que he hecho hasta el momento.

Presumido

B: ¿Cuántos instrumentos tocas?

T: Pues llevo 8 canales ocupados en la mesa. Todavía estoy experimentando y probando al respecto, y estoy seguro de que este proceso jamás se detendrá (ahí está la gracia y variedad del proyecto, precisamente). Ahora mismo llevo un gran sintetizador digital (una joyita rarísima que era de Iván Ferreiro), el anteriormente citado Yamaha de juguete, guitarra eléctrica, acústica, bajo, APPs del móvil, percusiones, cajas de ritmos, voz. Al principio llevaba también una batería electrónica pero tardaba unos 8 minutos en construir los temas.

B: ¿Es Presumido el cierre o el comienzo de un ciclo? ¿Qué hay escondido tras ese alter ego?

T: Realmente no se cierra nada, pero es toda una declaración de intenciones hacia mis nuevas motivaciones. Desde luego se abre una nueva época en mi vida. La más personal, exigente y seguramente, difícil. TODO ha cambiado. He pasado de cumplir funciones totalmente específicas en proyectos consolidados a empezar de cero. Ahora soy MI banda, MI mánager, MI publicista, MI productor. MI responsable total y absoluto (o absolutista). Habiendo remarcado todos esos «MI» creo que queda más que claro el por qué de llamarme Presumido. No tiene nada que ver con una cuestión de ego sino de reparto unipersonal de todas las tareas. Hay mucha gente que no traga este nombre. Perfecto, eso nunca me pasaría si me llamase «lápiz» o «silla».

B: Podemos decir que «Ahora Mejor» es un trabajo bastante personal, ¿no? Y aunque esté formado por sólo cuatro canciones, al escucharlo da la sensación de que hay mucho más escondido en su interior. ¿Cómo fueron los procesos de composición y grabación?

T: El concepto Presumido cogió forma este verano. Ha sido el peor año de mi vida en cuanto a desgracias personales y eso se ha reflejado totalmente en las canciones. Te podrá gustar o no, pero es brutalmente personal. Es un EP oscuro en su temática e instrumentación, pero ahí está el título en contraposición Ahora mejor, como un presagio de cambio hacia lo positivo. Además, a nivel curiosidad, te contaré que de forma intencionada, el título sólo aparece en la contraportada, como diciendo: «Acabas de escuchar el año de mierda que he pasado y ahora todo irá a mejor».

Sobre el proceso de composición, durante un mes y pico he hecho una canción al día, con lo que tengo casi 40 temas ya… Me levantaba, improvisaba con el piano hasta que me salía una idea, la grababa en el móvil y me iba toda la mañana a caminar por Casa de Campo. Cuando volvía al mediodía ya había terminado la canción. La tarde la dedicaba a grabarla «bien» en casa. Así día tras día fue el proceso de maquetación. Y la grabación del EP fueron dos tardes en casa de un talentoso amigo. Cuando las cosas están claras se hacen a la velocidad de la luz.

B: ¿Es este epé el anticipo de algo largo?

T: Ahora mejor es el primero de 2 epés. De hecho el siguiente seguramente lo grabe después de navidades y lo saque en medio año. Al estar dedicándome por completo a esto quiero que se note que es un trabajo totalmente continuo y regular. La idea que tenía era que a estos dos epés le siguiese un larga duración, pero ese concepto cada vez va más a contracorriente. Por un lado la industria en general sigue tomándose el LP como algo más «profesional» y consolidado… Por otro, gran parte del público es cada vez es más superficial y se la pelan ideas como «disco conceptual»… Sólo quieren un single bailable que escucharán hasta el primer estribillo para cambiar después de canción… Esta tendencia me está dando mucho asco y miedo, porque se empiezan a demandar tan solo «singles» para la pista de baile y, sin ir más lejos, la semana pasada hablando con gente de dos grupos muy famosos de las pistas de baile y festivales españoles, me decían que se estaban sintiendo «obligados» a hacer tan solo singles con una letra de mierda, una melodía de niño de 4 años y una velocidad concreta para bailar y poder así seguir «en la cresta» del indie patrio. Volviendo a la pregunta, iré a por el LP, aunque la gente ya no escuche elepés.

B: ¿Este cambio en el sonido te ha hecho escuchar más grupos de ese palo? ¿Nos puedes dar alguna pista de tus influencias ahora mismo?

T: La inspiración de Presumido ha sido radicalmente intrínseca. Desde que acabamos con Galicia Caníbal hasta ahora (más de un año) he dejado de escuchar música, pero totalmente. Los que me conocen saben que ni CDs en la furgo, ni Spotify en el ordenador, etc. Haciendo así el mayor ejercicio de introspección de mi vida. Y creo que me ha salido muy bien, porque me gusta mucho el resultado. Como estoy totalmente desconectado del mundo exterior musical no sé si mis canciones son originales o huelen a rancio, pero te aseguro que salen de dentro, no del entorno. Ahora ya llevo unas semanas «reinsertándome» y la verdad, no conozco a casi ningún grupo de los que veo en las revistas o escucho en la radio. Poco a poco. Creo que he hecho bien. Mira, el otro día me decían que Cosas Raras (el tema con el que abro el EP) recordaba a noséquégrupo electrónico de los 80… Y yo respondía: «Cosas Raras es un blues a una velocidad muy lenta, tocado con juguetes y sintetizadores, en lugar de instrumentos de blues band». Ahí está, podéis comprobarlo.

B: El feedback artista-público es bastante claro. ¿Cómo te sientes con la cercanía de toda la gente que te está apoyando?

T: ¡Me siento tan sorprendido como emocionado! Pensé que la difusión iba a ser mucho más pesada y lenta. Pero fue colgar el single (No vuelvas) y pasar de las 1000 reproducciones en sólo unas horas, extendiéndose como un virus. La verdad es que estoy recuperando parte de la fe que había perdido en la raza humana. Me ha emocionado mucho el ver que algunos medios le están haciendo más caso a mi proyecto totalmente independiente y autoeditado que a otros en los que he colaborado y que tenían inversiones multimillonarias de promo por detrás. Además, lo más bonito es que veo que el apoyo viene de la gente de verdad, no de los «medios sobornables». Estoy MUY AGRADECIDO.

Presumido2

B: ¿Cómo ves la escena independiente española en este momento?

T: Pues la veo un poco insegura y perdida, fiel reflejo de la sociedad en general. En los últimos años había ya cada vez menos proyectos de corazón y más intentos de seguir estúpidas modas. La gente se ha cansado de las modas y ahora existe un vacío artístico y ninguna moda creíble para consolarse. A dejarse de tonterías y currar, coño! Debo decir por otra parte, que Galicia, no sé si por su «aislamiento» geográfico, siempre tiene ideas y grupos muy interesantes que aportar. Y ahora mismo, especialmente los grupos de Matapadre Records, son brutales.

B: Y por último, la pregunta obligatoria: ¿Vamos a verte el próximo año en directo? ¿Tus planes para el futuro?

T: Por supuesto! Presumido es un proyecto totalmente enfocado al directo. Tengo la presentación en mi casa, El Barco de Valdeorras el día 26 de diciembre y estoy ya cerrando fechas de gira a partir de febrero. VOY A POR TODAS! Eso sí, esta vez con cabeza. Llevo ya en torno a 1000 conciertos encima con otros proyectos, y gran parte han sido gomazos. Así que ahora no quiero tirarme de cabeza a fechas suicidas. Por eso quiero hacer un poco de ruido ahora e ir poco a poco saliendo del cascarón.

Mis planes de futuro están claros. Levantar este proyecto cueste lo que cueste. Lo he dejado todo, he pedido el paro que tenía acumulado y me he puesto a trabajar en esto desde cero. Muy agradecido por la entrevista.

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“Si hubiésemos querido ser más comerciales dejaríamos de hacer la música que hacemos”: entrevista a Maryland

Dicen que el tercer disco de un grupo refleja las bases de lo que son y serán. Maryland acaban de publicar su nuevo trabajo en el que la gran novedad es el cambio de idioma. Ahora cantan en castellano demostrando una mayor confianza y seguridad en sí mismos y en sus letras para ya no esconderse en el inglés. Este disco se presentará el próximo día 15 en la sala El Sol, en Madrid, y además, podremos disfrutar de él buena parte del próximo año dado que han sido uno de los ganadores de la nueva edicion de Girando Por Salas. Por todo esto y más, hemos hablado con Ruben Castelo, que nos ha respondido a nuestras preguntas y nos ha contado qué hay detrás de Los años muertos.

Maryland

Bea: Una de las novedades que traéis con este nuevo disco, sin obviar la incorporación de Álex Penido a la batería, es el cambio importante que supone el dejar atrás las letras en inglés para cantar en íntegramente castellano. ¿Qué os llevó a tomar esta decisión? ¿La necesidad de ser mas cercanos al público? ¿Un interés comercial? ¿O es algo más complicado? ¡Un, dos, tres, responda otra vez!

Rubén Castelo: Al finalizar la gira de Get Cold Feet teníamos en mente el poder probar a llevar nuestra música hacia otros terrenos y uno de los retos era probar a cambiar el idioma sin cambiar nuestra esencia como grupo. Grabamos varias demos, las enseñamos a amigos cercanos y tanto nosotros como ellos llegamos a una misma conclusión: que Maryland seguía siendo Maryland cantando en castellano. Si hubiésemos querido ser más comerciales dejaríamos de hacer la música que hacemos. Cierto es que al expresarse en castellano a la gente le entra antes para dar una opinión a favor o en contra.

B: ¿Qué elementos pensáis que diferencian este disco de, por ejemplo, «Surprise»? ¿Y similitudes si las hay?

RC: Surprise es una carta de presentación con sus virtudes y sus defectos. Tiene ese aire de inocencia y de poca experiencia y es un disco que cuenta multitud de historias o vivencias. Los Años Muertos es monotemático y hecho ya con algo de experiencia, aunque cada día sigamos aprendiendo. Similitudes, podemos decir que está hecho con las mismas ganas e ilusión y que lo hemos grabado, al igual que Surprise, fuera de Galicia.

B: Se dice que la primera impresión de un disco viene de la portada y sin embargo, ‘nunca se debe juzgar un libro por lo mismo’, ¿no? ¿Qué importancia le dais vosotros a ello y quién está detrás del diseño?

RC: Nosotros siempre le hemos dado un cuidado especial a los diseños. De hecho solemos tener retrasos a la hora de salida de los discos por este tema porque nos gusta cuidar estos detalles y la discográfica se acaba enfadando con nosotros :) Nos gusta entregar el disco al diseñador que escogemos y que él plasme lo que le evoca el disco. Para esta ocasión repetimos con David Sierra, que fue el diseñador de Get Cold Feet, y acertó de pleno. Recuerdo que le llamé por teléfono para darle la enhorabuena el día que recibimos el boceto porque ¡la portada era tal cual mi salón en aquel preciso instante!

B: Es interesante cómo el primer corte del disco, «Los años muertos», homónimo al propio álbum, empieza muy ‘in media res’. ¿Es una forma de dejar claro al oyente el cómo sonará a partir de ahí?

RC: La escogimos porque nos encanta con la fuerza con que entra. Además el orden del disco sigue una cronología particular y tenía que ir de primera por lo que cuenta.

B: Voy a hacerme un poco la sueca en esta pregunta porque Arturo y tú nos lo habías contado durante el concierto del pasado mes de octubre en el Torgal, pero, ¿cuál es la historia tras el título del álbum?

RC: ¿Puedo hacerme el sueco yo también? La historia del título no tiene mucha miga. En realidad es más autocrítica que afirmación… y paso palabra.

B: De entre todas las canciones, ¿cuál es vuestra favorita? ¿Hay alguna anécdota concreta detrás de alguna que queráis compartir? (Ehm, por «La caleta del sol» y tal…).

RC: Cada miembro te puede decir más de una, al igual que yo. Yo particularmente me quedo con la que cierra el disco, Camino, por como salió y su significado. Y que gracias al desconocido «Firewater» se pudo grabar, ya que le echó una mano a las cuerdas vocales (risas). Le pusimos como título La caleta del sol en homenaje a la urbanización donde estábamos alojados en Sant Feliu durante la grabación. El edificio era muy peculiar. Tenía de todo: piscina, cancha de tenis, playa a 50 metros, ping pong, cancha de baloncesto, etc. ¡Y desgraciadamente no podíamos utilizar nada por estar grabando todo el día!

B: Volviendo un poco al principio, ¿os ha sido mas fácil el escribir las letras? ¿Mas natural ahora que cantáis en vuestro idioma nativo?

RC: Al principio se te hace cuesta arriba el escribir en castellano porque produce una sensación parecida a cuando piensas que todo el mundo te mira. Es raro. En inglés tienes más recursos a la hora de esconder lo que quieres decir.

B: Qué influencias os gustaría citar, no solo en música, sino también qué libros o películas os han inspirado en este disco.

RC: Pues a los cinco nos influyen multitud de grupos y cosas. Podríamos decir infinidad de grupos y estilos. Escuchamos absolutamente de todo. En mi caso siempre suelo meter algo que tiene que ver con alguna película, sobre todo a la hora de jugar con los títulos, y no me suele gustar desvelarlas, pero por ejemplo Pozo de almas hace referencia a un conocido arqueólogo y una de sus aventuras. Refleja muy bien el significado de la canción: ¡una y no más, Santo Tomás!

B: Y para terminar, ¿qué pregunta os han hecho más veces en una entrevista?

RC: Pues hasta Get Cold Feet la pregunta crucial era «¿por qué en inglés?” y a partir de Los Años Muertos, “¿por qué en castellano?».

B: Muchas gracias, chicos. Suerte con el disco, con la gira y nos vemos el 23 en la Mardigras.

RC: ¡Gracias a vosotros! ¡Os esperamos! ¡Y un saludo de parte de los cinco!

foto 2. martín rodríguez

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