Tras la muerte de Andrew Wood en 1990 a la temprana edad de 24 años, los restantes miembros de Mother Love Bone vagaron sin rumbo unos cuantos meses hasta toparse con Chris Cornell (vocalista y guitarrista de Soundgarden y ex-compañero de piso de Wood), persona que haría que sus vidas cambiaran completamente gracias a la creación del supergrupo Temple Of The Dog, donde el propio Cornell junto a Jeff Ament, Stone Gossard, Mike McCready, Matt Camaron y Eddie Vedder (en el tema Hunger Strike) rindieron tributo al fallecido músico. De hecho, el nombre que tomaron para bautizar al proyecto fue extraído de una canción de Mother Love Bone llamada Man of Golden Words.
Perretes jugando
Lo que comenzó siendo una agrupación de músicos haciendo música «sin más» para rendir homenaje a un amigo terminó llevando a la creación de una de las bandas más importantes de los años noventa que, a día de hoy, sigue tan activa como el primer día: Pearl Jam. McCready y Gossard, tras la separación de Shadow (banda a la que también pertenecieron) unieron sus fuerzas con Jeff Ament mientras todavía andaban a vueltas con el primer y único largo homónimo de Temple Of The Dog. Los tres crearon una nueva banda y se apodaron Mookie Blaylock (en referencia al baloncestista) dando un primer concierto a finales del año noventa con un todavía poco conocido Eddie Vedder a la voz y Dave Krusen a la batería (reemplazado por Dave Abbruzzese en 1991).
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Por problemas de copyright Mookie Blaylock tuvieron que cambiar su nombre por Pearl Jam, bajo el que lanzaron Ten, álbum indispensable del género que pegó un merecido gran salto en muy poco tiempo.
Y llegó la revolución
Mientras Skin Yard pasaban bastante desapercibidos con su Fist Sized Chunks, el resto de grupos vivieron su momento cumbre de inspiración y sobre los escenarios. Pearl Jam con su Ten, Nirvana con Nevermind y el tema Smells Like Teen Spirit en especial (una pena, hay muchas mejores canciones en ese disco), Screaming Trees con Uncle Anesthesia, Soundgarden con Badmotorfinger y Alice In Chains con el EP Sap y el álbum Dirt, ambos de 1992. Estos fueron básicamente los trabajos más representativos del comienzo de la década junto a otro tanto de bandas como Mudhoney (Every Good Boy Deserves Fudge y Piece Of Cake), Hole (Pretty On The Inside), Babes In Toyland (Fontanelle), etc.
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Todas las bandas mencionadas anteriormente ya eran algo conocidas en la escena por sus grabaciones de años anteriores o por tener a miembros de otros grupos pioneros (véase a Mudhoney y Pearl Jam). Así como la fama llegó directamente para las que más salían en la TV o radio y más podían girar, también existieron formaciones con menos éxito comercial. Es el caso de Seaweed, Paw, Hammerbox, Truly, My Sister’s Machine o Bratmobile. Eran grupos con un gran talento en su mayoría, y que no tenían absolutamente nada que envidiar a sus «papás», pero que se quedaron por el camino. Fue especialmente curioso el caso de My Sister’s Machine, ya que Nick Pollock, vocalista y guitarrista, había militado en Alice N’ Chains (así se hacían llamar en sus comienzos) cuando eran todavía un grupo de glam sin demasiados planes de futuro.
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En el punto intermedio teníamos a los Stone Temple Pilots, Candlebox, TAD, 7 Year Bitch o a las ya citadas L7, que para los supuestos amantes de la música que se hizo hace ya casi treinta años atrás solo estuvieron presentes con cuatro o cinco temas. Hacemos la excepción con Stone Temple Pilots que quizás gozaron de una salud musical más acentuada, pero por el resto nada, se mantuvieron en un clarísimo segundo plano sin llegar a caer en el olvido demasiado rápido.
Nuestro estilo no es el grunge exactamente, pero por ahí andamos
¿Que nuestro estilo no es qué? ¿¡Te reviento!?
Mientras Douglas Coupland daba las últimas pinceladas al libro Generación X, que ayudó a enmarcar como ganado a todo el movimiento juvenil, y mientras Cameron Crowe terminaba de rodar Singles!, película que daría más y más coba a todo en la gran pantalla y en la que colaboraron bastantes músicos de Seattle, aparecieron -o ya existían, pero no eran muy conocidos- una serie de grupos que así como no encajaban del todo como grunge, tampoco eran algo demasiado distinto. Hablamos de Jane’s Addiction, Blind Melon, Smashing Pumpkins, Brad o Three Fish, siendo estos dos últimos proyectos pararelos de integrantes de Pearl Jam. Esta cuadrilla de músicos bebió mucho del rock del momento, incluso sus primeros trabajos se podrían meter casi en el mismo saco si tenemos en cuenta la gran variedad de sonidos e influencias con las que contaba cada uno de los grupos.
Los Smashing Pumpkins triunfaron con temas como Disarm, Geek U.S.A. o Siva mientras que Blind Melon hacían de su primer LP homónimo un diamante en bruto con temazo tras temazo (como se suele decir). Jane’s Addiction fueron al fin reconocidos con Ritual de lo habitual y gracias a los clásicos Three Days y Been Caught Stealing. Fueron hijos bastardos de los años ochenta, pero su reconocimiento vino más bien después.
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Lo de Three Fish y Brad fue ya otro asunto. Su fama fue casi nula exceptuando el disco Shame de los Brad y algún que otro trabajo posterior de los mismos. Si en algún momento fueron reconocidos fue mucho después de su nacimiento y básicamente por tener en sus filas a gente de otros proyectos (Pearl Jam en este caso).
Los de siempre siguieron ahí
Nirvana lanzarían en 1992 un álbum con b-sides y rarezas titulado Incesticide para en 1993 volver a cambiar su enfoque musical ligeramente hacia algo más experimental con el disco In Utero. En este largo también hubo cabida para canciones ruidosas y caóticas como ya fueron Endless Nameless o Territorial Pissings, que fue el caso de Frances Farmer Will Have Her Revenge on Seattle o Tourette’s, pero también hubo cabida para cosas más pausadas como Dumb o All Apologies, todo ello llevado a la cima con esa jam titulada Gallons of Rubbing Alcohol Flow through the Strip, que contenía desde trazos de psicodelia hasta noise rock.
Nirvana han venido del pasado para felicitarnos por el artículo
Los otros tres jinetes, Pearl Jam, Alice In Chains y Soundgarden, también siguieron sacando material pero no lograron plantarle cara al gigante Nirvana. Todos tuvieron una vida provechosa con su éxito pero, y esto es muy discutible, no les agradaba demasiado. Personajes como Cobain o Vedder odiaban la fama, las bandas prefabricadas, los playbacks y los mass media. Vivían de la incorformidad que les causaba el mundo, rompían sus guitarras y eran «malos» y rebeldes.
Si tuviéramos que hacer una lista de grandes canciones de estos cuatro años (1990-1994) pondríamos en la cumbre a Alive, Smells Like Teen Spirit, Spoonman y Would? seguidas de cerca por Suck You Dry de Mudhoney, No Rain de Blind Melon y Nearly Lost You de Screaming Trees. Aclaramos que éstas serían las composiciones más conocidas y pseudocomerciales del momento, y aunque esto quite que fueran malas, todos los grupos tenían canciones mucho mejores. Cuando terminemos el artículo crearemos una lista en Spotify para que podáis escuchar tanto lo más conocido como lo más valorado por las minorías.
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Nos encontramos ya casi en el final del especial. En el antepenúltimo artículo hablaremos de las bandas que aguantaron tras el deceso de Cobain, de esa etiqueta llamada post-grunge y de las separaciones y nuevos proyectos que hubo por el camino hasta el 2002, fecha que nos llevará a repasar lo que pasó hasta nuestros días viendo lo que sucedió con los que todavía siguen en pie y/o se han reunido. También habrá un hueco especial para esas nuevas promesas que guardan todavía la esencia de aquella bonanza musical y para algún que otro grupo español y latino en la quinta y última parte.
Especial grunge: Parte I | Parte II | Parte III | Parte IV | Parte V