Archivo de la categoría: Crónicas

Crónicas de los eventos a los que hemos asistido contados desde nuestro punto de vista particular. Puede que no os guste, ya avisamos, pero también puede que sí.

Lolapop Cartel

Festival Lolapop 2012 @ Redondela (08/09/2012)

Como un ave fénix renació de sus cenizas. Cambió de emplazamiento, de Ponte Caldelas a Redondela, y lo hizo con ganas, fuerza e ilusión. Ernie Producciones vio como el sábado se iba cumpliendo todo según lo previsto en la quinta edición del festival Lolapop. Con ocho artistas en su cartel y un buen recinto en el muelle de la localidad, en la parroquia de Cesantes, el espectáculo por fin tomó esta villa que disfruta de una ubicación excelente a la hora de atraer público, ya que se encuentra entre las ciudades de Vigo y Pontevedra. Aunque al principio no se notó, como suele pasar en los festivales, puesto que había muchos claros entre el público en las primeras actuaciones. Eso sí, según se iba cumpliendo con el horario establecido era más complicado encontrar un lugar centradito por delante del control.

Antes de iniciar esta crónica, desde Tanaka Music queremos dar las gracias a la orgnización del Lolapop, que corre a cargo del sello Ernie Producciones, por confiar en nosotros y acreditarnos para cubrir el evento, al igual que a otras muchas web especializadas que se encontraban por allí.

Lolapop Cartel

Los primeros que se subieron a las tablas fueron los vigueses Mvnich sobre las 20.00 horas. Presentando su primer disco, INA, que ya se puede escuchar en streaming desde el pasado miércoles, demostraron las ganas de tocar que expresaban en la entrevista publicada el viernes en esta nuestra casa. Destacaron, como no podía ser de otra manera, canciones como la del single de adelanto, Silver Rain, en medio de un buen directo en su conjunto.

Rusos Blancos tomaron la alternativa tras un rápido interludio. La noche se iba cerrando en torno al muelle de Cesantes cuando los acordes más poperos de este quinteto madrileño invadieron la zona. Al igual que los anteriores, el disco debut, como es lógico, tuvo mucha presencia. La queda voz de su cantante comenzaba con cada tema de Sí a todo, cuya crítica a cargo de Scared Queen podéis leer aquí mismo. Mientras, uno de los artistas más esperados de la noche iba calentando y estirando en el backstage como si se fuese a enfrentar a una prueba deportiva. Situado a la izquierda del escenario, Borja Laudo, o lo que es lo mismo, Bigott, aseguraba que era su primera visita a la provincia de Pontevedra a la vez que comentaba lo “bien montado” que estaba todo. Por cómo se llenó la pista los momentos previos a su salida, se auguraba un buen espectáculo. Y no defraudó.

En un ambiente recogido, con todos los componentes casi en el centro, sus movimientos frenéticos, emulando un poco a Ian Curtis, hacían vibrar a los incondicionales fans que se encontraban en primera línea. Canciones como Cannibal Dinner no faltaron en un repertorio en el que el público, una vez hubo finalizado, pidió más de este hombre que es genio y figura, como demostró en la entrevista que nos concedió tan solo unos días antes. Fue una pena, en algunas ocasiones, que el sonido no estuviese del todo a la altura, como ocurrió cuando el otro grupo gallego del cartel subió al escenario. Maryland irrumpió con un toque más rockero y distorsionado. De hecho, tras el trajín que se vivió con Bigott, algunos espectadores optaron ya no solo por ir a por algo de beber o de comer a las barras, como era habitual entre concierto y concierto, sino que sentaron en una acera en el lateral que no daba al mar; pero cuando los de Vigo invadieron el recinto con el potente sonido de Get Cold Feet, muchos se levantaron para sumarse a una fiesta que parecía no tener fin. Disfrutaron e hicieron disfrutar por igual. No faltó, como suele suceder en todos sus shows (y como ya hicieron en el Lolapop para niños), la foto final del público con la polaroid. Por cierto, curioso detalle de los integrantes de Mvnich al subir durante el concierto de sus «vecinos» para tocar la batería y la pandereta bebida en mano.

Maryland Lolapop

Maryland en acción

Tras estos, los andaluces (concretamente de Granada) Niños Mutantes no bajaron el listón llegada ya la media noche. Era una de las bandas más esperadas de y, una vez más, cientos de personas se agolparon en las primeras filas en la única actuación del grupo este año en toda Galicia. De nuevo, el último disco de la banda, Náufragos, tuvo mucha presencia, aunque no dejaron de lado las otras grabaciones de su ya larga carrera. Precisamente, el título de su último trabajo al menos no se cumplió, porque al parecer horas antes habían subido a un barco para conocer la próxima Illa de San Simón (de la que quedaron prendados).

El último grupo en salir al escenario fueron los jienenses Supersubmarina. El cantante, José Chino, estuvo muy solicitado mientras presenciaba los recitales de las otras bandas y se sacó infinidad de fotos con los fans. Pero llegó la hora de la verdad, y los temas de Electroviral y, sobre todo, de su nuevo álbum, Santacruz, hicieron que el público comiese de su mano (la parte femenina, más que ninguna). Ni siquiera la lluvia que comenzó a caer hizo que se moviese un alfiler. Total, no hacía frío y tras el calor de toda la jornada sirvió como estupenda medida para refrescarse. Además, no afectó en absoluto a una de las sorpresas de la noche, que fue la salida de Virginia Díaz DJ (justo antes de Charli-e DJ) para agradar con una genial sesión a los presentes y también a Niños Mutantes, ahí es «nah».

Con todo, y pese a las quejas de algunos colectivos locales, el festival llegó a buen puerto (nunca mejor dicho) y, personalmente, espero que se celebre durante muchas más ediciones porque significa un revulsivo en la zona, sobre todo este año, con la cancelación de otros eventos como el Dolorock o el Cultura Quente. El propio director del festival, Josiño Carballo, indicó en El País que «la experiencia ha resultado muy positiva, teniendo en cuenta que, en realidad, era una primera edición y que solo tuvimos un mes de promoción».

Por cierto, que no andaba yo para fotos, pero si lo que queréis ver es una buena selección, no dejéis de entrar en esta página de Alberto Pérez Barahona, que realizó un estupendo trabajo, al igual que hizo con este vídeo que os dejamos a continuación y que colgó Desconcierto:

[youtube id=»93XPwkztD5g» width=»600″]

Lolapop: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm

Share

Jane Joyd

Jane Joyd @ Praza da Constitución (Vigo, 07/08/2012)

Hay que admitirlo, Jane Joyd se hace querer. Ante un público poco participativo (o con falta de «feedback», como ella dijo), la coruñesa se empeñó en intentar arrancar algún cariño de una audiencia que parecía adormilada. Pero poco importó. Su recital fue estupendo. Lleno de energía, con sorpresas, intimista, relajado, alterado y, sobre todo, increíble. La Praza da Constitución de Vigo se abarrotó el martes para disfrutar de una de las figuras musicales gallegas del momento. Y Jane Joyd, como cabría esperar, no defraudó en absoluto.

Jane Joyd

Jane Joyd

El Ayuntamiento de Vigo eligió la céntrica plaza para realizar un ciclo de conciertos denominado «Noites Temáticas». La primera cita la ocupó Elba Fernández, más conocida como Jane Joyd. Para la ocasión, creyeron que era buena idea disponer de varias sillas en frente del escenario, lo que ocasionó muchos problemas y solo una ventaja. Empecemos por lo bueno: todas estaban ocupadas a las 23.00 horas, cuando comenzó (puntualmente) el concierto. Sigamos con las malas: los curiosos ocupaban el 70 por ciento de las plazas y, al ver que quizás no era lo suyo, simplemente se levantaban y se iban con el paso de las canciones, lo cual no daba muy buena imagen; un concierto íntimo de este tipo necesita de atención por parte del público, y las terrazas anexas al escenario (a unos dos metros en algunos casos) restaban ese regustillo de lo cercano y «profundo» que debería haber dejado el concierto, y, para finalizar, quizás por el hecho de estar sentados, el «feedback» del que hablaba Elba no se desató en casi ningún momento. Porque ella, al menos, dio suficientes motivos para ello.

Y los dio desde el primer momento, cuando arrancó con The Cage, tema que abre su segundo EP, Shy Little Jane Presents: The Dramatic Tale of Her Animals. La fuerza vocal desatada en ese momento cautivó a todos y a cada uno de los espectadores, fueran o no curiosos. Acompañada en esta ocasión tan solo de su guitarra y de un enorme Xulio Vázquez, percusionista de la habitual banda de siete componentes, Jane Joyd fue enganchando su primer trabajo con el segundo. De esta forma pudimos disfrutar por igual de canciones como Heartless Horse (The Disappearing Act) o Try try try.

Elba, entre otros futuros grandes de la escena musical nacional

Canciones preciosas como Renard Came To My House, Stole My Smile And Left Forever (cuyo título, Elba, anunció simplificado) aportaban un aura oscuro a la plaza, sumado a la nocturnidad del momento, que hacía incluso que otros temas más directos y animados como Last Days siguieran la línea marcada por esa voz a veces dormida y a veces hiperactiva, junto con su amiga, la guitarra. Pero también hubo tiempo para las versiones. Una de ellas fue la de Hardly Wait, canción en la que PJ Harvey aportaba fuerza con una guitarra eléctrica y en la que Jane Joyd la sustituía por sus cuerdas vocales.

Otra de estas «covers», en realidad, no fue tal, puesto que se trataba más bien de una colaboración. Eso sí, si cabe, fue más interesante, puesto que esta era la sorpresa que había anunciado la artista a través de las redes sociales. Los miembros de Trampoline se subieron al escenario en un momento dado para tocar una gran From the Inside. Elba dejó la guitarra a un lado y disfrutó junto a David Tizón y Marcos Rivera cantando uno de los cinco temas perteneciente a su Fog E.P.. Y, la verdad, nos quedamos con ganas de escuchar algo más de este grupo formado a caballo entre Vigo y Bueu.

«Agora é cando nos baixamos do escenario, vós aplaudides pedindo outra canción e volvemos para tocalas», anunció, todo sonrisas, Elba, antes de tocar sus últimas dos canciones. Y ese último coletazo de energía y sentimiento fue para la genial The Nightmare, corte de su primer trabajo, del año 2010, que funcionó como elegante despedida a un público que, esta vez sí, aplaudió con mucho entusiasmo a una de las mayores promesas gallegas y nacionales del momento. Y no, no es para nada una exageración.

Jane Joyd

Xulio y Elba, en una de las últimas canciones

Casi una hora y media de concierto para alguien que agotó la primera tirada (esperamos una segunda, por supuesto) de su segundo trabajo, que tan buenas críticas ha recogido en todas las publicaciones. La última pieza, de hecho, se la llevó nada más y nada menos que Bon Iver, como bien explicó durante el espectáculo. ¡Ah! Y de paso, aquellos que la comparan con Russian Red, ya se pueden ir olvidando del tema. Son polos opuestos y ayer, Jane Joyd, lo demostró una vez más. Apostad por ella, porque es apostar por la calidad y el futuro.

Jane Joyd: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm
Trampoline: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm

[toggle title=»Galería de fotos (Pulsa para ver)»]

[/toggle]

Share

Resurrection Fest 2012 - Cartel

Resurrection Fest @ Celeiro (Viveiro, 02-04/08/2012)

Os mentiría si os digo que hay otro festival en el mundo del que nos guste más hablar que el Resurrection Fest. Ya antes de nacer este blog, en este pequeño pueblo lucense llamado Viveiro se celebraba un pequeño festival de hardcore y punk que sorprendió a muchos desde el comienzo. Su primera edición fue en 2006 junto a Sick of It All y Walls of Jericho y desde entonces no ha parado de crecer, sobre todo gracias al savoir-faire a la hora de escoger artistas por parte de los organizadores y el apoyo del alcalde de la localidad, Melchor Roel. Siendo gratuito en un principio y ahora con precios bastante reducidos para lo que consiguen traer, a día de hoy es una cita ineludible para casi 30.000 personas provenientes de toda Europa con los grupos más importantes de la escena mundial del hardcore, del punk y del metal. Los beneficios no sólo son culturales, sino económicos, con un impacto en la zona de varios millones de euros. Os habíamos contado cómo fueron las dos ediciones anteriores (2010 y 2011) y este año no será menos. Queremos dar las gracias antes de nada a la organización, ONP Productions, por confiar en nosotros una vez más y acreditarnos para cubrir el evento. Y no sólo a nosotros, sino a muchas otras webs especializadas que seguro harán un buen trabajo y mejor que otros medios generalistas.

Resurrection Fest 2012 - Cartel

Reparto por escenarios y horarios

Enlaces rápidos:

Jueves, 2 de agosto

Afortunadamente, el tiempo acompañó durante gran parte del festival y así fue que llegamos a Viveiro con un sol abrasador durante la tarde del jueves con enormes ganas de festival. A diferencia del año pasado y no sabemos si por nuestras quejas, las acreditaciones de prensa se pudieron recoger allí mismo en la entrada sin esperar gran cola por lo que no nos teníamos que perder ningún concierto. Aunque como llegamos justillos, tuvimos que montar la tienda en el cámping, comer y demás, nuestra entrada se demoró hasta bien entrada la tarde y nos perdimos inevitablemente algún bolo. Sea como sea, un 10 para la organización por mejorar esas cosas que fallaron con anterioridad. A mayores, hemos de decir que la cola en sí para entrar al recinto era más que fluída, algo que todos agradecimos en todo momento.

Resurrection Fest 2012 - Entrada

La entrada del festival, algo más grande que las que muchos de vosotros comprasteis (ak ak ak)

El recinto disfrutaba este año de tres escenarios con la gran duda de cómo se repartirían y cómo afectaría el sonido de cada uno a las actuaciones: el Monster sería el principal a un lado, mientras que el Jägermeister, algo más pequeño, sería el cubierto en una carpa bastante alargada, justo al lado del mini-skatepark y del Arnette, el escenario secundario para bandas locales y acústicos. Sorprendentemente, se escuchó bastante bien y los pocos acoples de sonido que hubo fueron en el Arnette (el único que tenía actuaciones durante las de los grupos principales), quienes sufrieron bastante en ocasiones. Quizás en este caso sí que se debería cambiar de lugar en próximas ediciones, pero los otros dos no estaban mal situados.

Resurrection Fest 2012 - More Than A Thousand

Nos sentimos algo mal por habernos perdido este conciertazo, pero lo remediaremos

Como decimos, entramos algo tarde por una cosa u otra, y nos perdimos las actuaciones de los portugueses metalcoretas Another Day Will Come, los barceloneses Moksha, los madrileños Adrift y los también lusos More Than A Thousand (¡con la de ganas que les tenía!). De estos últimos, me hablaron maravillas de la actuación, pero de todas maneras, para los neoyorkinos This Is Hell ya nos encontrábamos dentro del recinto y pudimos escuchar algo de su buen directo y efectivo metalcore. Su cantante, Travis Reilly, nos deleitó con una buena voz llena de fuertes berridos con la que interpretó principalmente temas del último de los cuatro álbumes de estudio que tienen hasta el momento, destacando Acid Rain o Black History, entre otras. Corto (30 minutitos de nada) pero intenso. Tras acabarse, aprovechamos el hueco de Strength Approach, los sustitutos italianos de los caídos Wisdom In Chains, para ver la zona de merchandising, muy bien montada e inundada de emblemas de Suicidal Tendencies por doquier. Yo, por mi parte, aproveché para comprar algo y se agradeció poder pagar con tarjeta.

Resurrection Fest 2012 - Converge

Jacob Bannon casi suplicando que se escuchase bien dentro de la carpa

Llegaba uno de los platos fuertotes del día: los americanos Converge. Repetían actuación en Viveiro tras 2010 y aún así no les faltaron fans para verlos. Lleno sustancial dentro de la carpa del escenario Jägermeister y una hora por delante para contentar a los presentes. No tardaron en meterse en el bolsillo a sus seguidores más acérrimos comenzando con la larga Jane Doe (11 minutos que sonaron en su totalidad) y pese a lo confuso que puede resultar esta faceta tan mathcore del grupo, no defraudó a muchos. Lo que sí defraudó fue el sonido. No sabemos si fue por el propio grupo o el estilo de canciones que estaban tocando, pero se escuchaba algo raro y mal. Sobre todo en esa canción se notó más este problema, ya que para disfrutar totalmente de ella se necesita una cuasi-perfección sonora. Una lástima… Posteriormente, se darían más casos de mal sonido (quizás no tan graves) pero también otros grupos sonaron de maravilla.

Sea como sea, el vocalista Bannon se mostró muy enérgico en todo momento lo cual le provocó unos cuantos fallos notables a la voz que se le perdonaron sin problema. La gente respondía al estímulo y no paraban de volar cuerpos por encima del público ni durante las pausas. Y a pesar de tener un setlist poco habitual, la gente se unía a cantar con Jacob cuando éste bajaba y les ponía el micrófono delante mientras el resto de la banda gobernaba desde arriba. Tras informar de que habrá nuevo disco a finales de año, debutaron un tema nuevo, y casi al final mientras versionaban a Entombed (Wolverine Blues) nos fuimos a por avituallamiento y a coger sitio para la fiesta del día. Pese a no ser mi estilo, los fans quedaron más que contentos y salvando el problema de sonido, el grupo en sí estuvo en su sitio. Como detalle, más tarde nos dijeron que Bannon lanzó el micro contra los altavoces al acabar y casi rompe algo. Setlist del grupo.

Resurrection Fest 2012 - Reel Big Fish

Imaginad la voz de pocholo diciendo «FIESTAAA» mientras veis esta foto

El objetivo de Reel Big Fish en la tarde del jueves era claramente hacernos mover el esqueleto y una banda de ska punk como ellos es capaz de levantar hasta un funeral con sus trompetas. Los californianos aprovecharon muy bien sus 40 minutos comenzando con una de las versiones del Enter Sandman de Metallica más divertidas que recuerdo. Algo así como decir «papa parapa» en cada estrofa durante toda la canción mientras muchos de nosotros nos reíamos cuando intentábamos cantar la letra verdadera y ellos no querían. No faltaron otras grandes versiones como la de Take On Me de A-Ha aunque, si la memoria no me falla, no tocaron una muy solicitada Brown Eyed Girl de Van Morrison.

Tampoco faltaron sus grandes éxitos Sell Out, Beer o I Want Your Girlfriend To Be My Girlfriend Too, con los que nos desgallitamos y tiramos parte de nuestros «refrescos» por culpa de nuestros meneos y los de los vecinos, y numerosas pistas de su último trabajo Candy Coated Fury. Mucha fiesta de la buena, aunque ya empezábamos a vislumbrar uno de los grandes problemas de este Resu 2012, que viene ya de otras ediciones: el famoso puto polvo tóxico del Resu. Gigantescas nubes de polvo se levantaban en cada pogo, circle pit, wall of death o incluso con un poco de viento. De todas maneras, disfrutamos de uno de los mejores y más divertidos conciertos del día y del festival entero. ¡Gracias, Reel Big Fish! Ojalá venga otro grupo similar en la edición del año que viene.

Resurrection Fest 2012 - Pianos Become The Teeth

Aquí los pianos se convirtieron en dientes, pero en el caso del batería de The Eyes los dientes se convirtieron en cachitos (luego lo explicamos)

Con poquísimo tiempo de margen entre conciertos y mientras comentábamos lo bueno que fueron los RBF, regresamos a la carpa para ver un rato desde el exterior a Pianos Become The Teeth. Esta banda de Baltimore mezcla con soltura el post-hardcore con el post-rock y el screamo en muchas de sus canciones de sus dos discos de estudio y sus splits. No son fáciles de digerir si no eres fan de este tipo de sonido, la verdad, y una vez más el sonido de la carpa (al menos desde donde yo estaba) no dejó brillar con luz propia al grupo, pero pese a todo, el rato que estuvimos presenciando su show no nos aburrió demasiado. Algo cansaditos por el viaje, el montar la tienda y demás decidimos sentarnos en medio del campito a chalar un rato.

Resurrection Fest 2012 - Set Your Goals

«Hey, ¿no tendréis por ahí una mascarilla de oxígeno? ¿O un pañuelo o algo?»

Siendo ya casi noche cerrada, les llegaba el turno a los también americanos Set Your Goals. Pop punk remezclado con melódico dependiendo de la canción y una actuación la mar de alegre. La voz me recordó de primeras a Simple Plan, pero nada que ver (afortunadamente). No vimos demasiadas canciones (si no recuerdo mal, al menos The Few That Remain la tocaron mientras aún estábamos), ya que el hambre apremiaba y decidimos salir a cenar. Muchos de los hardcoretas y metaleros más extremos también hicieron lo mismo, por cierto, ya que era lo más light del día. Finalmente tampoco llegamos a tiempo para ver a Nasum, una banda sueca de grindcore a la cual le tenía muchas muchas ganas, pero es el problema de ir un sólo redactor en esta ocasión. ¡Lo sentimos por los interesados!

Resurrection Fest 2012 - Agnostic Front

El cantante de «Agnóstica» Front, Roger Miret, con sus mejores galas

Los que no nos podíamos perder por nada del mundo eran los neoyorkinos más esperados de la noche: Agnostic Front, uno de los emblemas del hardcore macarreta tipo Madball y Suicidal Tendencies. No obstante, el cantante de Madball, Freddy, y el de AF son medio-hermanos (hijos de la misma madre, de descendencia cubana), así que tienen grandes influencias entre ellos. En esta ocasión, el grupo venía con casi una «nueva formación» ya que uno de los dos guitarristas y el batería se unieron en la banda en 2009 y muchos desconocían sus caras. Eso no importó para que los mayores circle pits del día (y las mayores nubes de polvo del día) hicieran acto de presencia con los innumerables himnos que tiene esta banda. Desde el legendario Gotta Go, el For My Family y pasando por el It’s My Life, durante una hora y cuarto que se nos hizo hasta corta nos deleitaron con su poderoso hardcore y el propio Miret nos demostró su poderío físico corriendo y saltando durante casi todo el concierto.

Regalándonos numerosas palabras en español con fuerte acento cubano, encendieron en repetidas ocasiones al público quien no mostraba signos de debilidad tras las primeras 10 horas de evento. Quizás algo más apagados cuando tocaban temas nuevos y no los old school, pero animados. Como detalle, Pirri de Escuela de Odio subió al escenario a cantar con ellos el tema Police State. Con un bis de cuatro canciones, una versión de Blitzkrieg Pop de Los Ramones y el An Open Letter to NYC de los Beastie Boys, se despidieron con una gran ovación. El sonido no falló casi nada y si no tenemos en cuenta los efectos vocales que usaron, los norteamericanos tuvieron una actuación notable. Contentos, nos poníamos a esperar la última actuación de la noche.

Resurrection Fest 2012 - H2O

A este batería no le importaba el polvo, que decía que estaba rico. En otro orden de cosas, diversión 100%

Otros que repetían, ya que estuvieron en Viveiro en 2009, fueron H20, otra banda más proviniente New York. Todavía con el polvo flotando de la actuación anterior y sin parar de toser (pese al consejo de Axionymous de llevar un pañuelo, me olvidé y lo pagué caro), comenzaron una de las interpretaciones más directas del día, a la par de ser bastante divertida. Su cantante Toby Morse parecía un ardilla correteando de un lado a otro sin asfixiarse mientras cantaba, aunque de vez en cuando soltaba un pequeño discursillo corta-rollos (vale que había bonita luna, pero vamos, estás en un concierto de punk, ¡dale caña!). Muchos éxitos de la banda, que para algo los tiene, y durante los bises subieron a un invitado a cantar que no conseguí identificar. Riffs del War Pigs de Sabbath, tributo a The Police y para acabar el concierto una versión que enloqueció a muchos: Friends Like You de Sick of It All. No recuerdo si fue en esta canción, pero un paisano consiguió subirse al escenario y la seguridad no tardó mucho en placarlo. En general, un buen concierto para acabar la primera jornada de festival que nos dejó con ganas de más, y por eso fuimos al centro de Viveiro a tomar algo con el resto de resus hasta altas horas de la noche. He aquí un vídeo resumen de la organización del primer día, quienes citan que casi 10.000 personas se acercaron hasta el evento:

[youtube id=»Ov4i3WKWyaE» width=»600″]

Viernes, 3 de agosto:

La noche dio para bastante, pero la sorpresa desagradable al llegar al cámping a las 7 y pico de la mañana fue encontrarse con una carpa a todo volumen que no paró hasta las dos de la tarde. Se recorrieron la discografía de SA, varios discos de Slayer, Metallica y punk español aleatorio, y yo y muchos más nos acordamos de sus parientes más cercanos durante ese tiempo. Afortunadamente, debió haber quejas que el resto de días nos dejaron tranquilos, pero ese día sufrimos por eso, por el gran calor en las tiendas al dar el sol y por todo en general. Sin apenas dormir, tuvimos que ir a la playa a intentar descansar y asearse, aunque poco se pudo hacer por recuperarse. Al mediodía ya no había tanto ruido ni tanta calor (¡la sombra había llegado a la zona!) y pudimos dormir dos horitas salvadoras. Tras ello, el todoterreno de Monster también fue un salvavidas con ruedas y nos despertó lo suficiente como para poder reponer fuerzas más tarde y seguir con el festival con ánimo.

Resurrection Fest 2012 - Crisix

El Resu es como España: también hay Crisix (ak ak ak)

Toda esta serie de circunstancias nos obligaron a perdernos también los primeros conciertos de la tarde, con mención especial de Crisix y MxPx AllStar, que tenía ganas de verlos: los primeros por ser una de las mejores bandas de metal del país (aún emergiendo) y los otros por ser «miticada» y un «must». Aún así, podéis ver aquí debajo uno de los momentos de Crisix: unas chicas con pasamontañas ataron a una silla eléctrica al cantante y este intentó cantar mientras lo freían. Además, versionaron a Misfits y su Last Caress (típicamente versionando también por Metallica). De MxPx, mi compañero Jimmy Jazz me habló maravillas: técnicamente guay y perfecto para los amantes del punk zapatillero como él, muy divertido pero muy muy corto. Como detalle, el guitarrista de Descendents, Stephen Egerton, actuó con ellos, y abrieron con la típica versión de Baba O’Riley de The Who. Lo siento enormemente también por Black Knives, Grankapo, Misplace y los madrileños Proud’Z, pero es lo que hay.

Lo que sí os puedo contar respecto al concierto de Misplace, es que uno de los momentos más emotivos del festival se vivió en su actuación. Juanji de Fragment Records salió a interpretar con ellos un tema de su legendaria banda Alarma Social. Un buen homenaje al trabajo incansable al frente de la discográfica, pilar indiscutible sobre el que se levantó la escena hardcore española y que por desgracia cierra sus puertas después de 15 años de lucha. ¡Ánimo, Juanji!

Resurrection Fest 2012 - Unearth

Trevor Phipps entonando una versión del «Me va» de Julio Iglesias

Tras reactivar la industria textil china comprando pañoletas en un «chino» del pueblo (yo y miles de resus más), partimos preparados al recinto. Una vez más, en el bus del cual os hablaré más tarde. Unearth, conocida banda de metalcore de Massachusetts, comenzaban en el escenario principal. Con la gente todavía llegando, se marcaron un buen concierto que quizás sonó algo mal (al menos desde una distancia considerable, desde donde los vimos) y creo que no conectó demasiado con el público por alguna extraña razón (ni conmigo, como fan del metalcore que soy). Aún así, cayeron temas como My Will Be Done, Endless o Giles que sí congeniaron y no nos dejaron demasiado mal sabor de boca. Casi al final, nos pasamos rápidamente por el escenario pequeño, el Arnette, donde Rain Is Art daban su show.

Resurrection Fest 2012 - Suicide Silence

El cantante de Suicide Silence, burlándose un poco de su compañero guitarrista Fuente

Primer plato grande del día: los californianos Suicide Silence. Se veían muchas camisetas de ellos a lo largo de todo el fin de semana y se ve que muchos fans tenían ganas de ver su deathcore característico. Y yo, también mucha curiosidad de ver cómo hacían esos berridos en directo que tan bien suenan en estudio. La verdad es que no decepcionaron para nada: grandísimos breakdowns que podrían romper el cuello de Alonso, growls revienta-gartantas, enormes pogos en medio de tormentas de polvo venenosas, mucho humo proveniente del escenario (por si se veía poco) y mucha dedicación por parte del grupo. Una verdadera banda de metal extremo, a pesar de su juventud. Y como tenían una caché que mantener, claro está, lo dieron todo. En algún caso, quizás dieron de más, como su pobre guitarrista Mark Heylmun. Aquí mismo podéis ver justo el momento en el que se esguinzó la rodilla y el tobillo. Acabó el concierto, pero la ambulancia lo esperó para llevarlo al hospital. Aquí lo podéis ver con un fan. Al final creo que no se presentaron a las firmas, pero tampoco sé si era antes o después del concierto. Comprensible o «feo por su parte» dependiendo del caso.

Resurrection Fest 2012 - Against Me!

No hay foto mejor por el momento, pero os mostraremos otra mejor de Laura cuando la tengamos

Otro platazo fuerte, casi fabada asturiana o cocido gallego. Laura Jane Grace y los suyos, Against Me!, pisaban tierra viveirense. Sin darle demasiada importancia, os pongo un poco en situación: el cantante del grupo Tom Gabel decidió convertirse en una mujer un poco antes de mediados de año y generó bastante polémica sobre cómo seguiría el grupo siendo ella una mujer y demás cosas. Para los que dudaban de su valía en pleno proceso de hormonización, o los que la criticaban, sólo puedo decir que acalló muchas bocas y Laura es amor. El grupo en sí fue perfecto técnicamente y creo que de los que más limpios sonaron en el escenario Monster. Dieron una actuación muy divertida de 50 minutos, dando una lección de cómo hacer punk rock válido para todos, desde los más tranquilos a los más extremos. Con bastante energía (destaco el batería, que qué lechazos pegaba el tío), no dejaron muchos de sus grandes éxitos fuera del setlist y hasta aprovecharon para presentar dos temas nuevos del próximo disco, Transgender Dysphoria Blues. Muy contentos con la actuación, tras saltar y bailar un rato, decidimos ver el final de ella desde la lejanía y presenciar un ratito del concierto en el Arnette de los vigueses The Chaos Is Coming, con un deathcore bastante bueno y un público pequeño pero entregado.

Resurrection Fest 2012 - Municipal Waste

Tony Foresta, de Municipal Waste, celebrando que este año sí tocan Fuente

¿Y las ganas que tenía de ver a los virginianos Municipal Waste? Creo que no era el único, ya que la cancelación de última hora en 2010 sentó como un jarro de agua fría. Para resarcirse, hicieron todo un señor show. Brutalísimos desde la primera nota, sólo podemos resumirlos como «mucha caña burra». Creo que la nube de polvo tóxico llegó a su máxima plenitud en este concierto, ya que los circle pits y walls of death iban casi a uno por canción. En uno de ellos, nos unimos nosotros pero no tardamos en salir casi asfixiados. En general, podemos destacar la actitud del grupo, muy fieros en todo momento, tanto con los temas más antiguos como los de su nuevo disco. En ocasiones el sonido parecía demasiado ruidoso de más (no sabemos si, una vez más, por la carpa, o por el propio grupo) y la verdad es que podemos afirmar que se quitaron la espinita de la cancelación de hace dos años, sin duda alguna.

Resurrection Fest 2012 - Soziedad Alkoholika

Juan de SA dando mucha brea. Y cagándose en todo lo que había por ahí Fuente

Por culpa de dicho polvo, nos fuimos un pelín antes de acabar a respirar aire fresco y a beber algo mientras esperábamos por un clásico: los vascos Soziedad Alkoholika. Leía hace tiempo a gente que se quejaba en Twitter de que «se comían mucho presupuesto» y que «no pegaban nada en el Resu», pero creo que demostraron que pegan mucho en un festival como este, y personalmente no creo que tengan demasiado gasto estando por aquí cerca de festival en festival, que no tienen que cruzar el charco ni venir del quinto pino. Salieron motivadísimos en general y su cantante Juan no paró quieto. No obstante, había mucho vasco viéndolos (con banderas y todo) y ellos lo agradecían con mucha «brea», como les gusta decir. Recordaron su anterior actuación hace años (2008 con Misfits, Agnostic Front…) y se alegraban de ver cómo creció aquel festival tan acogedor y humilde.

En cuanto a temas, barrieron con todo lo que se les puso por delante con pits enormes que ya les gustarían a muchos grupos de deathcore… Quizás pecaron de escoger demasiados temas de su último disco, Cadenas de odio, pero no faltaron todos sus clásicos (Ratas, Piedra contra tijera…) ni los éxitos más recientes (Sangre al fin y Política del miedo de su Mala Sangre del 2008). Cerraron con un brutal Nos vimos en Berlín, muy coreado, y nos dejaron con una excelente impresión, incluso para los que ya los habían visto. Hablando con unos cuantos extranjeros al día siguiente, les habían encantado pese a no entender ni pija. Y en otro orden de cosas, la nota negativa la pusieron unos «listillos» cerca de donde estábamos que, a pesar de ser hiperfans del grupo y conocerse todas las letras, se dedicaron a lanzarle cosas al guitarrista y grabarlo en vídeo durante un buen pedazo. Por suerte no le dieron.

Resurrection Fest 2012 - Glassjaw

El cantante de Glassjaw se ve que tuvo que ir a hacer de vientre a ciertos baños y ya era un experto

Glassjaw era para mí otra de las incógnitas del día. Escuchándolos en Spotify no me transmitían demasiado e iba con la mosca detrás de la oreja. Los presentaron en su día como cabeza de cartel (que al final no fueron) y quería saber por qué eran tan importantes. Con solo dos álbumes de estudio y numerosos EPs, llegaron a Viveiro para demostrar por qué estaban ahí y aclarar que, si no eran tan conocidos, era simplemente porque tuvieron mala suerte en su carrera con las discográficas. Su cantante Daryl Palumbo se mostró muy animado desde el comienzo, a diferencia del bajista y del guitarrista, pero a estos no se les puedo reprochar nada ya que instrumentalmente fueron muy buenos. Independientemente de esto, he escuchado críticas por ser un «tostón» y por otro lado alabanzas por ser geniales. Personalmente, no me desagradaron demasiado y les doy más que el aprobado pese a no ser tampoco muy de mi gusto su estilo. Tras doce canciones, se fueron sin despedirse, pero para aquel entonces ya nos encontrábamos reponiendo fuerzas a base de bocatas para lo que nos esperaba.

Resurrection Fest 2012 - Suicidal Tendencies

No son Latin Kings, son los putos Suicidal Tendencies, leñe

Y la hora del postureo llegó, la hora de demostrar quién era más true que el otro con sus gorras de marca de la casa, medias blancas impolutas hasta las rodillas y pañoletas en la cabeza. Los reyes del hardcore, Suicidal Tendencies, llegaban desde California con muchas ganas de repartir tralla como Agnostic Front había hecho el día anterior. Eran de los más esperados por un gran sector del público y la verdad es que a sus fans no decepcionaron para nada. Pese a comenzar con el sonido algo bajo (igual era percepción nuestra) comenzaron a tocar éxito tras éxito: Freedumb, Cyco Vision, Possesed To Skate, You Can’t Bring Me Down… Su cantante Mike me sorprendió mucho al no parar ni un solo segundo de correr entre sus compañeros de banda a lo largo de todo el escenario mientras cantaba. Realmente necesitas buenos pulmones para ello, sobre todo con el «cuerpo» que tiene. Una máquina, vamos. También dos de los nuevos miembros del grupo, el enorme batería Eric Moore y el bajista Tim «RAWBIZ» Williams, demostraron su virtuosismo con sus respectivos instrumentos. Tim estuvo muy activo y no dejaba de mostrarnos muchos toques funkies con su gran bajo, y Eric no paraba de jugar con las baquetas y hasta se marcó un gran solo que hizo que todos le ovacionásemos.

Para el final nos tenían algo preparado: el propio Mike comenzó a invitar a un montón de fans de las primeras filas a subirse al escenario y finalmente, cuando el grupo comenzó a tocar su último tema, la cosa se desmadró y subieron decenas de personas haciendo peligrar la estructura y la integridad física de los artistas. Hasta pensé que cortarían el sonido. La seguridad se vio totalmente desbordada ante tanta gente y al final tuvieron que cuidar simplemente de que no se rompiese nada y avisar por megafonía que se bajasen (¡que la había!). Podéis ver cómo se vivió desde el backstage este momento aquí, desde el propio túmulo de gente aquí y desde fuera aquí y en la imagen bajo estas líneas. Muchos vítores y aplausos tras esta actuación y a la organización le llevó tiempo desalojar la zona y prepararlo todo para el último bolo del día.

Resurrection Fest 2012 - Suicidal Tendencies (Invasión)

Ahí no se ve, pero hubo hasta gente surfeando por encima en el escenario mientras cantaban

Llegaba otro de los pelotazos del festival, uno de los grupos más importantes de la historia del punk y de los pioneros en el género pop punk y skate punk. Desde California, cómo no, llegaban Descendents preparados para rememorar 30 años después su disco Milo Goes To College y dar mucha caña a los fans, que se contaban por miles. Cabe hacer una mención especial a la camiseta de Milo edición «Spain» con Milo en plan torero. Que joder, estamos en Galicia, bien podían ponerlo bailando una muiñeira, o incluso de peregrino, pero no algo que no tiene nada que ver con Viveiro ni Galicia, donde se celebra el concierto. Detalles aparte, tuvimos ante nosotros uno de los conciertos más largos de todo el fin de semana y mucho punk cañero. Con canciones que apenas llegaban a los dos minutos, se anotaron un setlist de 28 canciones en hora y cuarto, incluyendo los pequeños shows que nos tenían preparados (la tabla de los mandamientos, por ejemplo) y abriendo con una versión de The Doors.

Resurrection Fest 2012 - Descendents

«13. No dirás el nombre de Madball en vano en Viveiro»

Respecto al físico, los años no pasan en balde. Si bien casi toda la banda se mostró con un gran rendimiento, el cantante Milo Aukerman se fue desinflando según avanzaba el concierto, más que comprensible con casi 50 años y si no paras de correr de un lado a otro mientras cantas. Su voz tampoco es la misma, pero oye, es un grupo que todo punkie debería escuchar una vez al menos en su vida (y poco os queda si no lo habéis hecho, que no creo que duren para siempre). Poco importó cuando sus I’m The One, Hope, Coffe Mug o Everything Sux reventaban el lugar y levantaban, una vez más, altas humaredas de polvo. Hacia el final, algo cansados por la noche anterior y atacados por la brisilla fresca de esa noche, nos fuimos a ver el final del concierto desde la zona Monster donde había un montón de artistas (gente de Municipal Waste, Angelus Apatrida o Suicidal Tendencies) y compañeros de prensa como nuestros compis de La Estadea, que fue un placer conocerlos.

Casi congelados, decidimos irnos cuando empezaba la sesión de los Nasty Mondays, los DJs encargados de alargar la fiesta en el recinto con música «acorde al festival». Lo poco que escuchamos fue el Gotta Go de Agnostic Front, pero una vez más, Viveiro centro nos esperaba a unos y las tiendas de campaña a otros. Con mucha más gente que el día anterior, aquí os dejamos el vídeo resumen de la organización de la segunda jornada.

[youtube id=»-gZcIWKVgRs» width=»600″]

Sábado, 4 de agosto:

El tiempo dejó de acompañar en el día grande y unas cuantas gotas se dejaron ver tanto por la mañana como en algunos momentos de la tarde. No había tanto calor tampoco, pero se estaba bien. Hoy eran pocos los que madrugaban tras el ambiente del día anterior y menos si había que hacerlo más de lo normal (el primer concierto era a las dos y pico de la tarde). Pero justo unas horas antes supimos por Twitter y Facebook que la llamada «maldición del Resu» se cobraba la primera (y última) víctima, y uno de los artistas no pudo llegar a tiempo. Here Comes The Kraken afirmaron ser víctimas de un fraude con el tema de los vuelos y se quedaron en casita, asumiendo todas las culpas y pidiendo perdón en el mismo Facebook del festival. Una pena… Lo que la organización hizo tras la noticia fue organizar todos los conciertos hasta esa hora para que no quedase vacío ese hueco, adelantando algunos conciertos, así que nos tomamos nuestro tiempo. Aún así pudimos acercanos por allí algo tempranito para ver un poco de la actuación de Back To 1984 en el escenario Arnette y más tarde a Tim Vantol.

Resurrection Fest 2012 - The Eyes

Uno de los conciertos más agridulces y vividos que he visto nunca

Llegaba el turno de una despedida. Un concierto muy agrio y lleno de rabia que decía adiós a la carrera de los barceloneses The Eyes, anunciado hace un mes en su Facebook. Era por eso que tenía muchas más ganas de verlos de lo normal y la verdad es que no defraudaron, pese a ser todavía muy temprano y no ser capaces de juntar tanta gente como se merecían. Sólo siete canciones, pero todas al 120%, seguramente como nunca antes habían tocado. Su cantante Jordi no paraba de hacernos saltar y correr en círculos mientras desplegaba un arsenal de vozarrones característicos de su melodic death metal patrio. Y digo vozarrón porque el sonido estuvo altísimo y hasta tuve que poner los auriculares para protegerme un poco (estaba muy cerca de los altavoces, pero aún así era demasiado). Miedo tuve cuando mientras tocaba Edgar, uno de sus guitarras, se subió encima de unas cajas (perfectamente casi dos metros de altura, ved aquí a la derecha) y tras aguantarle unos cuantos presentes en lo alto, saltó por encima y cayó en el suelo perfectamente en un breakdown. Finalmente, al término del concierto, se abrazaron todos juntos con cara de pena y se sacaron una emotiva foto con todo el público presente por detrás. Suerte en lo que hagáis chicos, esperamos volver a veros.

Mientras comenzaba Skarhead, una enorme masa de gente se aglomeraba delante del escenario Arnette. Era el turno del concierto acústico de Anti-Flag, del cual podéis ver aquí un poco. Nosotros decidimos que era buena hora para comer, así que una vez más, nos perdimos algún conciertillo (también el de Deez Nuts posteriormente).

Resurrection Fest 2012 - Angelus Apatrida

En esta ocasión, ellos son los siguientes

Parece mentira, pero debo de ser la única persona en España que le gusta el metal y que todavía no había visto a Angelus Apatrida, una de mis bandas favoritas y para mí la mejor banda metalera española que hay a día de hoy. Que soy muy fan, vamos. Así fue que venía con muchas ganas de pasarlo bien y disfrutar del concierto de Guillermo Izquierdo y los suyos, los cuales tuve el gusto de conocer durante la tarde anterior, como veréis más abajo. Comenzaron muy fuerte con el primer single de su último disco, You Are Next. Extremadamente rápidos y buenos técnicamente, dieron paso a la segunda pista del mismo disco, At The Gates of Hell, para saltar un poco al ritmo de la canción. La voz de Guillermo sonaba a rosas (rosas thrashers, pero rosas) y muchos de nosotros lo vivíamos enormemente. En una de las pausas entre canción y canción recordó que era un placer para ellos volver a Viveiro, que eran los únicos que tocaban por tercera vez consecutiva además de Madball, y que será un honor volver en futuras ediciones aunque sea como público. No descuidaron tampoco temas del resto de sus discos: de Clockwork tocaron la homónima y Of Men and Tyrants; de su primer trabajo, Evil Unleashed, cayó Versus The World; de The Call, las dos primeras, la frenética Killer Instict y Fresh Pleasure; y de su Give ‘Em War, también la homónima (en la cual aprovecharon para un wall of death levanta-polvo en el que nos metimos) y Thrash Attack, dedicada a los chicos de Crisix allí presentes, y que cerró el corto pero intenso concierto que presenció no demasiada gente. Muchos fanáticos pedían su versión de Domination de Pantera, pero no había tiempo para más. Nos quedamos con las ganas de verlos en sala para disfrutar de ellos a tope.

Ah, ¿que por qué había tan poca gente en Angelus? Bueno, al ser la tercera vez que venían, eran muchos los que prefirieron ver otra cosa, y sobre todo cuando tienes a Berri Txarrak en acústico con Gorka a la guitarra en el escenario Arnette, es comprensible que muchos se quedasen con la opción alternativa. Según me contaron, estuvo bastante bien y cerraron con una versión de Redemption Song «impecable».

Resurrection Fest 2012 - The Black Dahlia Murder

Trevor Strnad, el cantante de TBDM, susurrando el «Bailar pegados»

Para los deathcoretas que quedaron con ganas el día anterior, llegaba The Black Dahlia Murder directamente desde Michigan. En las últimas ediciones siempre eran un grupo que era pedido por muchos y este año ha sido su ocasión para presentarse en Viveiro. Desde lo lejos, porque la carpa Jäger seguía siendo una nube cerrada de polvo (había llovido un poco en el resto, pero no en la carpa, obviamente), pudimos apreciar cómo se lo montaban estos cinco chavales. El sonido dio señales de flaquear por momentos, pero no evitó que ellos dieran mucha caña brutal («extrema», me decían algunos) y que la gente les respondiese por igual tirándose hacia ellos por encima del resto o chocando los unos con los otros en cada riff. Eso sí, no se les entendía muy bien y aquí sí estábamos seguros de que era un cúmulo de circunstancias: la carpa y ellos mismos.

Para los fans del punk de toda la vida, también llegó un plato fuerte, Good Riddance. Su cantante Russ Rankin fue muy correcto, pero también muy frío y poco animado. He de decir que descansé un poco de todo el fin de semana charlando con la gente desde la lejanía y no le presté demasiada atención a este concierto, pero me quedo con el detalle del homenaje a Tony Sly, el recientemente fallecido cantante de No Use For A Name (muchos se enteraban allí mismo). Grandes circle pits, mucho salto y mucha diversión para toda esa gente que los sigue y que fue devuelta de repente a esos tiempos en los que tenían 15 años.

Resurrection Fest 2012 - Berri Txarrak

Gorka también es hamor. Como Berri al completo, en general Fuente

Berri Txarrak fue el grupo más querido de todo el fin de semana y también el autor del mejor concierto que he visto allí. Con la carpa totalmente llena de gente entregadísima, ellos dieron lo mejor de sí mismos. Gorka Urbizu y los suyos me parecieron de lo más especial en directo y he de decir que antes no me gustaban demasiado, pero ahora soy hiper-fan. Hasta me dan ganas de aprender vasco para entender sus canciones… Y es que además de buenos músicos, son buena gente. Dedicaron una canción de The Eyes por su separación, homenajearon a Tony Sly en uno de sus amplificadores y hasta hicieron amago de tocar una de No Use For A Name. Sonaron perfectamente pese a ser en la carpa y se vivieron con suprema intensidad sus temas más famosos: Denak Ez Du Balio (no, Tim McIlrath no estaba presente), Albo, Kalteak o Harra. También Matxet de Jousilouli subió con ellos a cantar el tema Zirkua y he de contaros que hubo un pequeño percance en medio del concierto. En medio de la pasión desenfrenada del concierto, Guillem, el batería de The Eyes, salió corriendo del backstage para saltar encima del público… con tan mala suerte que calculó mal la distancia y se comió un hostión bastante considerable. Esperemos que se encuentre bien, y que si lee esto, que muchos ánimos. Y la próxima vez, ¡a saltar más!

Resurrection Fest 2012 - Anti-Flag

Punk is not dead! Y sus peinados tampoco Fuente

Maravilladísimos ante tamaña muestra de calidad de los vascos, nos fuimos con el alma levantada a ver a los estadounidenses Anti-Flag, otros míticos del punk rock y del hardcore melódico de los 80-90. Fueron muy directos y geniales, con un concierto muy resultón y divertido en el que no faltaron sus mejores temas, una versión a The Clash (Should I Stay or Should I Go), y un circle pit y canción dedicada también a Tony Sly (podéis verla aquí). Unos cuantos presentes hasta intentaron hacer un castell humano en forma de pirámide con la emoción que tenían. El colofón final tras un montón de buenos temas como The Press Corpse, Die For The Government o This Is the End (for You My Friend), llegó con otro de los momentos de la noche: el batería Pat Thetic decidió coger su bombo, tambor y demás, plantarlo en medio del público, y seguir el concierto desde allí debajo para delirio de quienes estaban alrededor sin creérselo. Momento recogido en este vídeo, si os interesa, que muchos no vimos más que cómo empezó la cosa desde lo lejos.

Resurrection Fest 2012 - Dead Kennedy's

Dudé mucho entre esta foto o la de Cañita Brava, pero aquí se ven más viejos Fuente

La broma generalizada al finalizar este siguiente concierto fue que ya sabemos por qué son los Dead Kennedys. En su día fueron lo más importante del género, pero a día de hoy están bastante viejetes. Y ni que decir que el cantante nuevo no le llega a la punta de los talones a Jello Biafra en ningún momento. Sonando mal como pocos, salieron con ganas de fiesta pese a la edad (joder, es que el bajista Klaus Flouride tiene ya 63 años) y Rop «Skip» Greer hizo lo que pudo a la voz, animando a la gente que cantaba enfervorecida en las primeras filas mientras un gran grueso se pegaban en el mosh por detrás. He de decir que la carpa estaba más llena que nunca, no sólo de polvo, sino de gente. Hasta casi se quedó pequeña. No era raro sabiendo que muchos querían verlos, pero realmente decepcionaron y mucho. Recuerdo que me animé a meterme en el pit en las últimas canciones tras los bises para vivir Holiday in Cambodia y Viva Las Vegas en mis carnes y lo pasé de maravilla y la gente enloqueció, pero era simplemente porque, aunque lo pusiésemos en playback o con una banda de versiones, tendría el mismo efecto. Tras el último tema, dijimos adiós a la carpa hasta el año que viene y nos trasladamos al escenario Monster a por los dos grandes de la noche.

Resurrection Fest 2012 - At The Gates

Recordad estas caras: las veréis en muchas obras cuando necesiten una apisonadora

Como sabréis de algunas crónicas anteriores, mi segunda casa es Göteborg, la segunda ciudad más grande de Suecia, y de allí provienen muchos grupos ilustres del mundo del metal como In Flames, HammerFall, Engel… y At The Gates. Considerados unos de los padres del melodic death metal, tenían el difícil papel de acallar las críticas de esa gente que decía que «había mucho metal que no era acorde al festival». ¿Lo consiguieron? Yo creo que no puede haber nadie que haya visto más de cinco minutos de concierto que diga que sonaron mal, o fueron una mierda, o que no pegaban. Fueron uno de los mejores conciertos de todo el festival de largo. Simplemente demoledores, mucha «caña burra», una apisonadora como decía ahí arriba. La voz de Tomas Lindberg se presentaba atronadora, monstruosa, y tanto la batería de Adrian Erlandsson o las guitarras y el bajo sonaron perfectas en casi todo el concierto (quizás en la primera no, pero estaba lejos y no sé si fue realmente un problema). Sea como sea, un enorme trabajo de los técnicos de sonido y de los suecos.

Deleitaron con sus temas más famosos (Slaughter of The Soul, Blinded By Fear, Suicide Nation…) y también con muchos de su primer disco, para los old school presentes. Yo no pude más que presenciar este precioso espectáculo con los ojos como platos y la boca ligeramente abierta ante tal despliegue de calidad. Sólo duraron una hora, pero ojalá hubiesen durado dos. Para los que tenéis el gusanillo de verlos, alguien ha grabado el concierto entero y lo tenéis en dos partes en YouTube: parte 1 y parte 2.

Resurrection Fest 2012 - Hatebreed

Como dirían ellos, hay que vivir para esto

¿Y quién se llevaron el premio al grupo más esperado en general? Los estadounidenses Hatebreed. Yo mismo los esperaba. No es 100% mi estilo, pero tienen muchos temas que adoro (los tocaron todos) y son los que más tralla reparten. No quise perderme nada de este concierto, y me puse en primera fila con unas chicas por delante. Alrededor, otros gigantes con ganas de empujar, trepar y dar golpes, pero a esas alturas ya no importaba. Incluso las propias pruebas de sonido auguraban un show brutal, con un sonido altísimo pero fidedigno. Desde el primer tema, que ni recuerdo cuál fue, el público presente en la zona de «marcha» entró en trance. Sobrevolaban muchos por encima de nuestras cabezas, otros empujaban… La mayor nube de polvo (gigante y constante, para más inri) se vivió en este momento y reconozco que tras acabar me sentía como Salvador Raya y su prueba de la canela, tosiendo durante horas.

Resurrection Fest 2012 - Hatebreed - Jamey Jasta

Jamey Jasta buscando cosas para destruir

In Ashes They Shall Reap, Everyone Bleeds Now y un montón de temas llenos de breakdowns nos preparaban para lo mejor de todo su concierto: el triplete final de Live For This, I Will Be Heard y la apoteósica Destroy Everything. Reconozco que, pese a ser un tipo más o menos alto, casi temí por mi vida cuando sonaron las primeras notas del bajo de esta última. Una marabunta de gente se echó hacia delante y empezó a literalmente romper con todo (que a falta de cosas, coincidía que era gente). Tras esos dos-tres minutos de éxtasis, el grupo dijo para y nosotros nos quedamos con ganas de más. Fue un concierto bastante plano en ese sentido (pocas pausas e interacción, no hubo bises) pero fue un locurón máximo como pocos. A sabiendas de que ya había acabado todo, nos dimos un descansito en la barra todos juntos para analizar lo ocurrido, descansar y curar nuestras magulladuras. Gracias, Jamey & company.

Sólo quedaba la sesión de DJs de final de fiesta (a las 3 y pico de la mañana), organizada por el portugués Ninja Kaore, con la ayuda de un guitarrista en persona. Temazos de dubstep, drum ‘n’ bass y fuerte electro se dejaron escuchar pero ya no estábamos para esos trotes; muchos otros sí se quedaron. Nosotros nos desperdigamos, una vez más, por el centro del pueblo, y otros tantos al cámping a liarla. El Resurrection Fest 2012 había acabado.

Resurrection Fest 2012

A falta de vídeo de la organización, os informo de que 30.000 personas acudieron el sábado

Hora de reflexión, amigos míos. Las mejoras respecto a otros años en temas organizativos han sido notables. Apenas ha habido colas, no tuvimos problemas con acreditaciones y la suerte quiso que no hubo demasiados cambios de horario, fue todo bastante puntual. Pero aún así, hay cosas que mejorar (diría obligatoriamente) de cara a 2013. La principal es el tema del polvo. Vale que con una pañoleta o una mascarilla nos solucione algo, pero no del todo y es insufrible permanecer durante un concierto entero con tanto polvo. Un simple manguerazo antes de cada concierto (que para algo se alternan) creo que solucionaría mucho, y ya no digo poner una superficie de plástico como en muchos otros festivales europeos.

Por otro lado, para los desafortunados que tuvimos que acudir al cámping gratuito, se agradecería enormemente unos baños decentes y más numerosos. Siendo algo ordinarios, para ir a defecar podías echarte media hora en la cola fácilmente. Había sólo dos «puestos» en los baños de debajo del mítico restaurante (que también sufriría lo suyo con los infiltrados que iban a usar su servicio). Para ducharse, no llegué a comprobarlo, ya que aproveché las duchas frías de la playa, pero podría mejorarse todo bastante.

También el transporte al recinto debería mejorarse. No en calidad o frecuencia, sino en precio. Vale que 1 euro es un precio casi simbólico, pero haced cuentas… Un trayecto de menos de cinco minutos si no hay tráfico es muy corto. Podría ser incluso gratuito o podían ofertar un bono para todo el fin de semana, por ejemplo, que seis viajes aún son pasta. Es un dinerillo que hay que aflojar y muchos se quejaban del precio final.

También muchos se quejaron de la falta de información por parte del festival. No todo el mundo se sabía quién tocaba a qué hora, ni se había imprimido una chuleta en casa, ni tenían la aplicación de móvil. Muchos pedían el libreto informativo que se repartía en sitios puntuales y ocasionales en el que venía toda la información. A nosotros nos lo dieron a la hora de pedir en la barra, pero muchos no pudieron ni supieron dónde conseguir uno. Había tres o cuatro horarios pegados en la pared desperdigados por la zona, pero no era suficiente. ¿Solución? Repartirlo en la entrada, también como en muchos otros festivales. Sería un puntazo y muy de agradecer por todos. Y relacionado con esto, un mayor uso de la megafonía para informar de las cosas, tampoco era demasiado.

¿Y qué más? Siendo un poco tiquismiquis, cinco minutitos más de separación entre actuación. Recuerdo veces que acababa una banda, te dabas media vuelta para ir al siguiente y ya estaba sonando, cuando en teoría son cinco minutos de separación (que acaban siendo solapados por los retrasos a la hora de tocar cada grupo, sí). Un poco más de margen nos permitiría ir a los baños o a por refrescos sin perdernos una gran parte de los conciertos.

Tómense esto como una crítica constructiva de los pocos errores o problemas que existieron. El resto, si no se me olvida nada, fue perfecto, y realmente debo felicitar personalmente a la organización. ¡Seguid así!

Resurrection Fest 2012 - Gente de Jägermeister

Una de las miles invasiones zombie patrocinadas por Jägermeister

¿Qué fue lo mejor de este año? ¡No hubo casi ninguna cancelación como otros años! Las que hubo fueron menores, y las irremediables (sin margen de acción) fue sólo una. A por el pleno empleo el año que viene. Además, he de destacar el buen ambiente que se respira pese a las miles de tribus urbanas diferentes que conviven en él, o la de golpes que se da la gente entre sí. Siempre se ayudaba al caído y no vi ni la primera pelea. ¿Los mejores conciertos? Me quedo con Berri Txarrak (genios), At The Gates (máquinas), Agnostic Front (leyendas), Municipal Waste (metralleta), Against Me! (diversión y amor por Laura a partes iguales) y el subidón del final de Hatebreed, que aunque el resto de la actuación fue correcta, fue algo monótona, y el final nos emocionó a todos.

¿Lo peor? Ya dijimos que el polvo era Satanás encarnado, pero añado que la cantidad ingente de perroflautas que okupan el cámping es enorme. Gente que ni va al festival pero sólo van por el ambiente, traen a sus perros normalmente sucios y tienen bastante poca educación. Esperemos que no se convierta en el nuevo Ortigueira, porque los canes se hacían bastante molestos (vimos una pelea de uno con el de una pobre señora y los dueños ni se inmutaron hasta que la mujer cayó al suelo). Y en otro tema, en lo musical, claramente los Dead Kennedys fueron lo peor del festival. ¡Hora de retirarse, amigos!

Por último, queremos hacer un resumen de los personajes que nos encontramos esos días en el festival o los que descubrimos por las redes sociales. Ahí van unos cuantos fun facts:

  • Si el año pasado, un resu cruzaba la ría a nado a una mano para ahorrarse la caminata, este año también lo hicieron, pero a dos manos.
  • Hubo un resu que por 10 euros se bebió un cocktail asqueroso y que tuvo su efecto pertinente.
  • Otro resu se aburría en cierto concierto y propuso a sus compañeros que le golpeasen los genitales con un mechero.
  • Un coche bloqueó el camino al bus delante del cámping y unos valientes machocores lo movieron de sitio entre todos.
  • Hubo un grupo de resus que fueron vestidos como Leónidas y sus colegas de 300.
  • Una carpa de punkies puso música 24 horas durante la noche del jueves, dejando sin dormir a todo el cámping, hasta que debieron amenazarlos o multarlos y pararon el resto de días. Una de las causas de nuestro cansancio el viernes.
  • La popular resu Pikachu este año venía con el pelo de cuatro colores: amarillo, verde, azul y rosa.
  • Hubo un resu vestido de novia. Foto.
  • Hubo un resu con pierna biónica muletas que se pasó todo el festival en un lado del escenario viendo casi todos los conciertos. Es nuestro querido lector Adrián Xunkeira.
  • Hubo un grupo de resus que se aburrían de camino a Viveiro y se dedicaron a hinchar preservativos en medio del autopista.
  • Hubo unos resus cabreados que estuvieron tweeteando todo el fin de semana cosas.
  • Hubo un grupo de resus que se dedicaban a vender hamburguesas en la entrada en una tablita y fueron avisados en repetidas veces por la Guardia Civil. Hasta que los multaron no pararon.
  • Hubo dos resus que se casaron el día siguiente allí en Viveiro y tuvieron la suerte de disfrutar de las actuaciones de unos cuantos grupos.
  • Hubo un miembro de un grupo que saltó durante la actuación de otro, calculó mal la distancia y se comió la valla. Era Guillem de The Eyes.
  • Hubo un miembro de un grupo que se esguinzó la rodilla y el tobillo, pero ¡hey!, siguió tocando y luego fue al hospital. Era el guitarrista de Suicide Silence.
  • Hubo un resu que a falta de mascarilla o pañoleta, se enganchó un clínex arrugado en el puente de las gafas y él tan pancho. No hay foto, pero era muy cómico. Lo siento si nos lees, pero teníamos que ponerlo.
  • Hubo un grupo de gente que estuvo persiguiendo 24 horas al coche de Jägermeister pidiendo tubitos-chupito cual zombies. Dudamos que viesen algún concierto.
  • También recordamos la gente de dos bares locales que vendían bocatas y bebidas ambulantemente y no dejaban de pelearse por los precios con contraofertas. ¡Cuánto amor!
  • Por último, queremos recordar las numerosas cagadas de los medios generalistas de siempre a la hora de hablar del festival. No señalaremos a nadie, pero todos sabemos quiénes son.

Y hasta aquí hemos llegado. Esto ha sido todo lo que ha dado de sí la mejor edición hasta la fecha del Resurrection Fest, nuestro festival preferido, no solo por los grupos, sino por el ambiente, la gente, y el pueblo. Quiero dar gracias a Martín, quien me llevó y me trajo de vuelta a casa en su furgo, también a Adrián Xunkeira por alguna de estas fotos que veis con la marca del blog, y a todos en general por esta experiencia. Era mi primer Resu, pero sé de sobra que no será el último. ¡Gracias, gente! Como regalito, aquí el ya tradicional photoshop con algún artista que nos topamos en el festival. Servidor y Guillermo Izquierdo, voz de Angelus Apatrida, para ustedes. ¡Hasta el año que viene, resus!

Nota: Las fotos de Rubén Navarro con el logo del festival son propiedad del Resurrection Fest. Las que tienen el sello de nuestros compañeros de La Estadea pertenecen a ellos mismos. La foto del resu vestido de novia es de La Voz de Galicia. Los que no tienen marca de agua de Tanaka ni ninguna, son de Edgar (fuente al lado de cada foto).

Todos los setlists del festival: Setlist.fm
Resurrection Fest: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm

Share

Radiohead

Bilbao BBK Live @ Monte Kobetas (Bilbao, 13/07/2012)

Si el tercer disco se considera tradicionalmente la clave en la carrera de un artista, el segundo día del festival es el que marca el éxito o fracaso del conjunto. En el caso de esta edición 2012 del Bilbao BBK Live, los encargados de cortar el cable azul o el cable rojo eran británicos y se llamaban Radiohead, al igual que la mayoría de grupos que los acompañaban a lo largo del día en los escenarios principales (nótese la diferenciación, la frontera insalvable entre Radiohead y “unos grupos”). ¿Acabó todo con final feliz? ¿Salieron todos, afortunadamente, ilesos, cual vídeo de Impacto TV? Venga, vamos a comprobarlo.

Los entrantes de la tarde nos los comenta el corresponsal de guerra Billy Shears:

Empecé la tarde con Noah and The Whale, un concierto que prometía bastante por lo poco que había escuchado de este grupillo: sol, calor y un poco de pop saltarín para empezar la tarde. Sin embargo la cosa me decepcionó un poco. Aunque en algunas canciones si que se ganaron más al público y tocan más que bien sobre las tablas, el grupo no brilla especialmente por su actitud. Cumpliendo con un recital con los hits más que escuchados de la banda, se me asemejaron a unos Vampire Weekend descafeinados sin pena ni gloria. Bien, pero algo menos de lo que esperaba.

La cosa mejoró con el primer plato fuerte del día: Mumford & Sons. Con un público más que entregado, el concierto comenzó con la sobriedad que les caracteriza, con una seriedad y una actitud muy épica: todos los músicos en fila frente al público, armados de sus instrumentos y sus voces dispuestos a llenar el escenario de folk coral con pegada. Y así fue como se desarrolló el concierto, con una buena ración de temas ya más que conocidos de su primer trabajo y algún que otro adelanto de su nuevo disco. Quizá faltó alguna sonrisa de su líder, Marcus Mumford, que parecía especialmente frío durante la actuación, pero conforme el concierto iba llegando a su fin se fue animando y no faltó la fuerza ni el buen hacer.

Noah and the Whale

Noah and the Whale

Hay dos The Kooks: por un lado, los guitarreros puros que nos llevan directamente con la máquina del tiempo al momento de la década pasada en el que a todo el mundo le parecía una idea de puta madre crear cientos de grupos idénticos dentro de una avalancha post-punk de la que pocos son los que han sabido sobrevivir una vez pinchada la burbuja; por el otro, los que han sabido evolucionar desde aquella situación a una banda que integra la electrónica con buen gusto en la fórmula, para convertirse en algo bien distinto de aquello cuyos resultados son más que aceptables, aunque, dicho sea de paso, tampoco revolucionen el mundo de la música, como tampoco lo hicieron ni pretendieron en su etapa inicial.

El umbral que separa las dos versiones de los (enésimos) ingleses tiene forma de teclado: muerto de risa en el centro del escenario mientras la banda interpretaba los hits de sus dos primeros discos (Naïve, Sofa Song, Ooh La), sin embargo, se convertía en el punto de referencia cuando se abría la puerta a su nueva versión electrónica. Sin embargo, el entusiasmo del público ante unos y otros singles (no es este un grupo que se desmarque con caras B en un festival, precisamente, sino que sabe dar a la gente lo que quiere y cuando lo quiere) era bastante desigual, en favor, ni que decir tiene, de los temas que hicieron famosos por unos meses a la banda.

The Kooks

The Kooks

El camarada Shears, cómo no, también tiene una opinión sobre estos chavales. Y no solo eso, sino que accede a compartirla con nosotros:

Con un toque más roquero continuaban la fiesta en el escenario 2 The Kooks. No pude situarme muy bien para verlo por la aglomeración tras Mumford, pero aún desde algo lejos podía notarse la energía de estos chicos que no dieron tregua en su repertorio. Un público más que entregado se dejó llevar por el pop guitarrero y con garra que desde el escenario nos iban lanzando. Unos habituales ya en varios festivales que siguen dejando buen sabor de boca cada vez que se suben a la tarima.

El hecho de no establecer una pausa sobre el papel entre el concierto del londinense Kieran Hebden, más conocido como Four Tet, y el que lo seguía, que era nada más y nada menos que el de los reyes del festival (que, como había ocurrido con The Cure y pasaría al día siguiente con Garbage, paralizaron también el resto de escenarios) le brindaba a Hebden la difícil labor del telonero, que, en resumidas cuentas, es algo que la mayoría de la gente acude a ver sin mayores expectativas que un temprano final de aquello.

A pesar de los esfuerzos de Hebden agitando la cabeza mientras la noche caía sobre Bilbao, el cuidado y el acierto con el que trazó su sesión o la indiscutible proximidad entre su trabajo y el de los artistas teloneados (con los que ha colaborado en más de una ocasión), la temprana hora imposibilitó que el respetable (el respetable: ¡toma ya!) se involucrase como lo pedía el set, y al artista no le quedó otra que ir engarzando de manera soberbia temas cuyas transiciones servían de recordatorio para mirar el reloj y comprobar cuánto faltaba para que entrasen los siguientes. Tan previsible como injusto.

Four Tet

Four Tet

Tras el telonero llega, por definición, el cabeza de cartel, que no lo era solo de día, sino del festival entero, como confirmó la presencia masiva de un público apelotonadísimo en busca del nombre que justificaba por sí mismo todo el BBK. De una manera similar a lo que comentaba para los Kooks (con los que apenas comparten otra cosa que no sea la nacionalidad), la evolución de Radiohead desde algo como el OK Computer que no se puede identificar con otra cosa que no sea la perfección, sí, que resulta tremendamente personal, también, pero que, al mismo tiempo, lleva una etiqueta “indie rock” (o como queráis llamarlo) del tamaño del Bernabéu, hasta la electrónica marciana de Kid A constituyó un golpe de timón que no estaba causado por la necesidad comercial, sino por la necesidad creativa y desembocó en uno de los debates más encendidos de la historia reciente de la música, entre los que consideraban un error no mantener la fórmula que los había llevado a lo más alto y los que aplaudían la ilimitada brillantez creativa del conjunto.

Aunque a día de hoy ese debate ya esté más que cerrado y los que en su día renegaron de Kid A hayan entrado en el programa de testigos protegidos, dotados de una nueva identidad para escapar del bochorno absoluto, la evolución de Yorke y compañía continúa, reinventándose (el verbo mágico) trabajo tras trabajo y marcando una frontera clara entre sus discos considerados como obras maestras y los que lo serán en el futuro, lo que hace que los Radiohead de 2012 apenas tengan nada que ver con los que alcanzaron el olimpo de la música en los años noventa. Tanto es así, que sus dos primeros álbumes, Pablo Honey y The Bends, no contaron ni con una sola representante en el setlist (tampoco Creep, no, ni falta que hacía); mejor suerte corrió el OK Computer, del que se rescataron (verbo utilizado frecuentemente en estos casos, pero pleno aquí de sentido), ya en los bises, Karma Police y Paranoid Android, que, además de cómo dos de los mejores temas de un álbum inmejorable, sonaron ajenos al resto del repertorio, pero no por ello provocaron un delirio menos notable entre los presentes.

Radiohead

Radiohead

El resto de la hora y tres cuartos de concierto lo ocuparon, de mano, los dos últimos discos, The King of Limbs (Bloom para abrir, la brillantez de Morning Mr Magpie, Feral, Lotus Flower y Give up the Ghost, más la cara B The Daily Mail) e In Rainbows (15 Step, Bodysnatchers, Nude, Reckoner), para abrirse progresivamente al Hail to the Thief (Myxomatosis, The Gloaming, There there), al Amnesiac (Pyramid Song, I might be wrong) y, sobre todo, a un Kid A que, además de contar con su corte homónimo, cerró antes de primer y segundo bis con unas deliciosas versiones de Idioteque y Everything in its right Place, que el tiempo ha convertido en propuestas aún más radicales y orientadas a la electrónica, que dejan el debate y la controversia original en un puro chiste.

Genio y figura en escena, Yorke, a ratos de pie, a ratos intimista (palabra cuya definición de la RAE es “sentado al piano”), acompañaba los momentos en los que no le tocaba cantar de bailes llegados desde los abismos del delirio, así como alguna pausa entre canciones para sacarse de la manga un discurso no demasiado hilado sobre lo mucho que nos robaban los bancos. Bueno. En resumen: ¿quién quiere a Creep o al OK Computer cuando tiene delante a Radiohead?

Por salud mental, acudamos de nuevo al contrapunto de nuestra segunda y más cabal opinión sobre el díptico Hebden-Yorke:

El nerviosismo iba creciendo en nuestros estómagos llenos de mariposillas conforme se acercaba el gran momento, tanto que algunos optamos por una cómoda explanada de césped para aguantar (como pudimos) a Four Tet. Sí, puede que la electrónica en directo no esté hecha para mí, pero el recital de cuarenta y cinco minutos de ritmo en loop con una pequeña variación aquí y dos toques allá no creo que sea para mucha gente. El error se hizo patente en cuanto se acercó el concierto de Radiohead: llenísimo total, imposible abandonar la cómoda explanada que ahora estaba llena de gente más a sus cosas que al conciertazo que los de Oxford se marcaron (y de no poca gente que se apresuró a pillar sitio para Vetusta Morla una hora antes de que empezasen…). Con una dosis justa de su último disco, grandes remembers en Karma Police o Pyramid Song  y golpes de efecto con los pelotazos de su anterior trabajo, In Rainbows, las casi dos horas se pasaron volando. Cuando después del bis llegó el gran final con Paranoid Android se sentía en el aire que estábamos ante el verdadero plato fuerte del día. Quizá supo a poco, quizá se habría agradecido un concierto tan mastodóntico como el de The Cure la noche anterior, pero bueno, así no acabamos tan empachados.

Empezaría explicando que no soy nada objetivo con Triángulo de amor bizarro, a los que considero una de las propuestas nacionales más estimulantes de lo que llevamos de siglo, lo que serviría de justificación para que mientras la verborrea entre canción y canción que me resulta sobrera en una amplia mayoría de las bandas me arranque una sonrisa aquí, ya sea cuando les da por lanzarle un viva a Bielsa (Marcelo, controvertido entrenador del Athletic de Bilbao) o cuando se meten sin que nadie los llame en conflictos políticos de los que salen con brillantez cagándose en el partido del gobierno.

Advertiría, digo, el sesgo de mis opiniones ante una banda que adoro, pero se trata, en realidad, de una polarización más que justificada merced al indiscutible derroche de molar que logran con hipérbatos como el insuperable “de Jesús el peinado tener” (El himno de la bala). Ante un público que se moría de ganas de petarlo, pasadas ya las 2 de la mañana (nada que ver con conciertos como el del Primavera Sound del año pasado, a la hora del té, donde todo el mundo hacía lo que podía, pero es difícil derrotar al monstruo de los horarios), además de la citada pista de apertura de su álbum de debut, cayó todo lo que tenía que sonar, lo que incluye hits de calado como El fantasma de la transición, del mismo álbum o De la monarquía a la criptocracia y Amigos del género humano, del segundo y, por el momento, último. Hasta que el tema que adelantaron, que ahora se titula «Follar», pero que en realidad no, como explicaba la locuaz Isabel, que también es cantante y bajista del grupo.

Ante todo este despliegue, solo pueden quedar como divertidas anécdotas que el sonido de la carpa en la que se llevó a cabo el concierto fuese desastroso, sin que se distinguiese apenas la voz, o que el concierto fuese un auténtico visto y no visto (como estaba programado, por otra parte). Ahora seguro que rabiabais mucho si pongo algo del estilo “Galicia calidade” para cerrar sobre estos coruñeses; pero estáis de suerte, porque no lo voy a hacer.

Triángulo de Ramón Pizarro

Triángulo de Ramón Pizarro

Para los más valientes a los que el día no hubiese saciado, todavía quedaba una ración de Vetusta Morla, solapada en su parte inicial y que venía a ser lo de siempre: Pucho controlando a las masas con su desconcertante batuta de incomprensibles hits. Pero gustan mucho, vaya si gustan.

Fotos: Musicsnapper & Tom Hagen, menos el fotomontaje memo, que es de Pero vistes bien.

Crónicas: Día 12 | Día 13 | Día 14
Bilbao BBK Live: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm

Share

BBK LIVE

Bilbao BBK Live @ Monte Kobetas (Bilbao, 12/07/2012)

Frente a festivales que optan por un marketing basado en la diferenciación, convertidos en pequeños guetos de lo gafapasta, lo heavy o lo popero (no es necesario etiquetar con unos nombres que a bien seguro que ya tenéis vosotros en mente), contrastan un año tras otro las ofertas del Bilbao BBK Live, donde es tan difícil que te guste todo como que no te guste nada, y que dan lugar a un eclecticismo patente tanto dentro como fuera del escenario. Si nos empeñamos en trazar una tendencia, podría destacarse la omnipresencia de lo inglés (nuevamente, también entre el público), pero sin que esto signifique musicalmente mucho más que la correlación que uno pueda hallar entre propuestas tan dispares como las de Four Tet y los Maccabees.

Por fin llegó la fecha que parecía tan lejana cuando nos hicimos con nuestros abonos con la sola noticia de que Radiohead y The Cure pasarían por nuestro país con fechas exclusivas en el festival. Desde el día uno las confirmaciones se fueron sucediendo y a alguna pequeña decepción le siguió más de una sorpresa agradable: Garbage, Keane, The Kooks, Mumford And Sons, Band Of Skulls, Sum 41 y algunos otros pelotazos nacionales acabaron confirmando una cita de la que os traemos (con algo de retraso, pero es que aún nos estamos recuperando) un resumen fresquito y para toda la familia.

BBK LIVE

La primera jornada la abrieron en el escenario principal The Gift, pero mi atención se centraba a cuarenta minutos de su concierto, en el escenario 2: Lori Meyers. Con un concierto en el que los hits se sucedieron sin tregua y el sol de justicia que fue calentando el ambiente hasta el climax final con Mi Realidad, los Lori se marcaron una sesión de pop-rock patrio sin tregua y con garra, sin duda una de las mejores formas de empezar la fiesta. No faltaron las referencias a su querida Granada y la entrega del no poco numeroso público allí congregado para la ocasión (a pesar de la hora y del calor asifixiante) y del propio grupo desde el primer acorde, que hicieron de este primer concierto un aperitivo más que suficiente para ir calentando motores.

Cincuenta minutos más tarde los ingleses Band Of Skulls ya estaban dando caña en el escenario principal. Con su sobria y sencilla presencia sobre el escenario, guitarra, bajo y batería en mano, el trío de blues se marcó una sucesión de sus mejores temas sin apenas tregua. I Know What I Am, Light Of The Morning, Death By Diamonds And Pearls… Blues-rock de pegada poderosa y maestría evidente en su interpretación. Sin más artificios que su sonido simple pero impecable y con la seguridad que sus dos sólidos discos les dan, ofrecieron otros cincuenta minutos de rock y buena música para ir animando la jornada que esperaba impaciente los platos fuertes del día. De nuevo en el escenario 2 hacía unos instantes que habían empezado a tocar The Maccabees, uno de los grupos revelación de este último año con su último trabajo, Given To The Wild.

Band Of Skulls

Concentración bluesera de buena tarde, con la caló.

A las diez menos veinte minutos de la noche, ya oscurecido el monte, se subió al escenario uno de los primeros platos fuertes de la primera jornada del festival: Snow Patrol. Mi predisposición para este concierto no era muy buena, digamos que siempre me ha parecido un grupo muy plano, con talento sin duda para componer himnos pop y canciones que llegan a la fibra más sensible del oyente, pero sin garra. Ni un solo subidón, ni un susto, ni un cambio de dirección. Los temas desarrollan una estructura, un sonido que los construye y que no pasa de ahí. En directo se imprime algo de energía en los temas, pero no tanta como me gustaría. Hands Open fue, sin embargo, un gran comienzo con energía y actitud, pero más allá de eso las sintonías de series de médicos y las baladas planas fueron as protagonistas.

Snow Patrol

En anteriores capítulos de Anatomía de Grey…

La hora de finalización de este último concierto y la necesidad de hacerse con un sitio decente para el cabeza de ese día, The Cure, nos impidieron disfrutar de propuestas más que itneresantes en el cartel, como Jon Spencer, pero un cabeza es un cabeza. Antes de contaros como lo viví yo, Pero Vistes Bien tiene unas palabras que dedicar al recital de la mítica banda:

Unos problemas técnicos fueron los causantes de que el concierto comenzase con un retraso inusitado dentro de un festival que tiene de británica hasta la puntualidad. Para amenizar la espera, a Robert Smith le pareció buena idea empezar la fiesta acompañado de la acústica, incluso adelantando Boys don’t cry. Tras tres temas, las cosas volvieron a la normalidad y los incondicionales de la banda pudieron disfrutar de las tres horas de concierto prometidas, con las que parecían querer competir ante el mamotreto ofrecido semanas antes por Bruce Springsteen en Madrid; para los menos incondicionales, no faltaron los clásicos (¡como para que encima faltasen los clásicos!) para disfrutar a pequeños entre la inmensidad de un setlist que casi alcanza los cuarenta temas.

Robert Smith

Vamos, Rober, sal a bailar.

Matizando lo que apunta mi compañero, sí, el detalle de The Cure tras los retrasos en el concierto son más que loables: solo el hecho de que el propio Smith salte al escenario para decir por qué no están tocando ya es todo un detalle con el que nos habríamos conformado, pero marcarse del tirón Three Imaginary Boys, Fire In Cairo y Boys Don’t Cry en acústico ya fue el recopetín. Luego empezó el show de verdad y, sinceramente, más habría valido calidad que cantidad. Me explico, guardad las armas. Es más que de agradecer un concierto tan variado y tan largo y más en un festival, es más que de agradecer que el grupo se deje la piel, pero cuando el esquema del setlist viene a resumirse en «temazo-WTF WTF WTF WTF-temacillo-WTF WTF-temazo-WTF WTF» la cosa acaba cansando (al menos a un servidor). Cada vez que empezaba un nuevo tema y, efectivamente, se trataba de una de esas rarezas, una especie de pequeña desilusión invadió mi corazón hasta el punto de llegar a aburrir en tramos del concierto. En elegir un buen setlist, contentar y sorprender y saber resumir una carrera también está la gracia, señores.

The Cure

El tiempo no pasaba (para ellos).

Cerraban el día otro de los grupos que hacían brillar el cartel, Bloc Party. Por circunstancias ajenas a la organización, y no sin poco pesar, me fue imposible verlos (en gran parte por culpa del dilatadísimo concierto de The Cure, que se los merendó), pero mi compañero fue algo más cauteloso, decidió dejar a los Cure con sus cábalas de tres horas a la mitad y se pasó por allí:

En esto del rock guitarrero hay quien, como Kele Okereke, líder de Bloc Party, puede permitirse dar un concierto en piloto automático que, sin embargo, sacie a todos los presentes (presentes en el bibikei, como el frontman se encargaba de recordar periódicamente, para que nos quedase claro que sabía dónde estaba y este no era un concierto más): lo que se llama triunfar con la gorra (con la gorra, je, je, ¿captáis?), vaya. Contaron con la competencia inesperada de The Cure y los británicos (o sea, los otros británicos) decidieron jugársela a caballo ganador e ir distribuyendo melocotonazo tras melocotonazo a modo de dispensadores Pez: agitando la cabeza, precisos, pero sin que tampoco sea cuestión de pasarse de sabor. No faltaron Hunting for Witches, Banquet, ni This Modern Love, pero también hubo tiempo para presentar en sociedad su milimetrado último single, Octopus, recién salido del horno, o para hacer un poco el canelo fusionando su Flux con nada menos que We found Love, de Rihanna. Y para cerrar, yendo otra vez a lo seguro, con Helicopter. Si funciona, no lo toques.

Y con lo que me ha contado Pero vistes bien cerramos este especial que en su próxima edición resumirá el gran día, el día en el que el cabeza de cartel estaba bordado con auténticas letras de oro.

Fotos: Musicsnapper & Tom Hagen

Crónicas: Día 12 | Día 13 | Día 14
Bilbao BBK Live: Página oficial | Facebook | Twitter | Last.fm

Share